Un clásico entre los sedán de lujo
El Maserati Quattroporte es uno de los modelos de la marca de lujo italiana que más tiempo ha estado en el mercado, gracias a una combinación de prestaciones, elegancia y el estilo italiano que tan distinguible se ha vuelto en el mundo de los coches durante todos estos años. El modelo actual prosigue con la renovación de la gama de la casa del tridente. El Quattroporte se enfrenta en el mercado contra coches como el Lexus LS, el Audi A8, el Jaguar XJ o el Mercedes-Benz Clase S.
El Quattroporte actual, que se vende desde 2016, tiene una apariencia señorial de los pies a la cabeza, empezando por una parrilla frontal grande – aunque en relación con el resto del coche, menos que en los otros modelos de Maserati – y unos faros delanteros delgados (aunque menos afilados que otros rivales de su segmento). La silueta general es la de un sedán de cuatro puertas estilizado de manera muy similar a otros sedán fabricados en Italia, dejando clara su identidad desde el principio.
En el lateral se destacan las tres hendiduras junto a las ruedas delanteras, un elemento clave que identifica a todos los Maserati actuales. La parte trasera se destaca por tener una altura bastante grande que permite tener un maletero mayor, además de unas cuatro salidas de escape (dos a cada lado) por donde sale un armonioso sonido de motor. Los faros traseros son horizontales y delgados, en vez de triangulares como en el Ghibli o en el Levante.
El Quattroporte es quizás de los modelos con más historia de todos los Maserati, habiéndose producido durante varias generaciones desde 1963 – el actual es la sexta generación, la segunda diseñada por Pininfarina. Aunque este coche no cuenta con versiones de competición, sobre su base se ha desarrollado tanto el GranTurismo (que sí que tiene versiones de carreras) como el GranCabrio.