Una alegría que atrapa
Mientras que en el segmento A hay coches que enfocan su interior tratando de cumplir con los mínimos, otros, como sería el caso de este modelo, lo emplean para dar un toque de diseño que haga más atractivos este tipo de vehículos al consumidor. De esta forma, el interior del nuevo Citroen C1 respira alegría y futurismo en toda la línea del salpicadero con una decoración bitono que se encuentra encabezada por la generosa pantalla de siete pulgadas sobre la que se conforma el resto de la parrilla interior.
Pese a que no tiene navegador, por lo menos se ofrece la posibilidad de sincronizar nuestro teléfono móvil a través de la tecnología Mirror Link. Sin embargo, y viendo cómo algunos de sus rivales están apostando cada vez más por navegadores de serie, es de esperar que en la próxima actualización profunda del C1 este elemento cobre un mayor protagonismo.
Respecto a los materiales que se emplean dentro del habitáculo, no se aprecia ningún plástico blando o que dé impresión de mala calidad. En el puesto del conductor, la lectura del tacómetro puede ser algo complicada si el usuario no convive adecuadamente con las estéticas más modernas. Los asientos son cómodos y el reposacabezas está integrado dentro de la estructura de manera que no hay hueco entre medias. Este diseño puede tener connotaciones positivas o negativas, dependerá un poco de la opinión de cada uno.
Como explican en ActualidadMotor, desde Citroën se ha optado por sacrificar la plaza central de la segunda fila de asientos y homologar cuatro plazas en total. Al ser un coche tan pequeño y estrecho era previsible actuar en este sentido. De altura los pasajeros no se sentirán incómodos, aunque por el contrario el espacio para las piernas es algo justo si se piensa en realizar un desplazamiento largo que se salga un poco del radio de acción habitual del C1. En la versión de 5 puertas las ventanas traseras no se pueden bajar, sino que se abren al compás. Tampoco hay presencia de altavoces.
El C1 tiene la misma capacidad en el maletero que el Peugeot 108, coche con el que comparte muchos aspectos. Estas dimensiones le hacen estar por delante de otros rivales directos como el Fiat 500, el Toyota Aygo o el Renault Twingo. Sin embargo, sus medidas también se ven superadas con holgura por parte de otros urbanos como pueden ser el Volkswagen Up!, el Seat Mii o el Hyundai i10. En resumen, el Citroen C1 se sitúa en la media del segmento y con una capacidad de maletero suficiente para portar un equipaje habitual.