Gama potente y variada
El BMW Serie 7 sorprende por una conducción dinámica y ágil más propia de una berlina de menor tamaño. Casi se podría decir que es un Serie 3 más grande. El hecho de que apenas se note su gran tamaño se debe a varios motivos. Uno es el empleo de materiales ligeros en su construcción, con elementos en aluminio, magnesio, plástico reforzado con fibra de carbono y acero. Aun así, el coche alcanza un peso que roza las dos toneladas. Para disimularlo, equipa de serie unas suspensiones adaptativas regulables electrónicamente y unas barras estabilizadoras que agilizan mucho el comportamiento del vehículo, incluso, en carreteras viradas.
En autovía, el confort es supremo. Las suspensiones absorben perfectamente cualquier bache que encuentre en su camino sin que los ocupantes perciban el más mínimo movimiento o vibración. Al elevado grado de confort influye también una insonorización espectacular del habitáculo. Incluso a altas velocidades, no se siente ningún ruido.
Si seleccionamos el modo Sport desde el selector de modos de conducción, tanto los amortiguadores como la dirección se endurecen y la respuesta del coche se vuelve mucho más viva, permitiendo que la gran berlina de BMW parezca más pequeña de lo que parece y gire muy plano en las curvas. El sistema de modos de conducción incluye los modos Confort, Confort+ y Eco Pro.
El excelente apartado dinámico lo completa la perfecta conjunción entre el motor y el cambio automático Steptronic de ocho relaciones desarrollado por ZF, apoyados en la tracción total xDrive. Incluso con el motor diésel menos potente, el de 265 caballos del 730d, el coche ofrece una capacidad de reacción muy buena, gracias a la perfecta relación de las marchas del cambio y al contundente par de 620 Nm entre las 2.000 y las 2.500 vueltas.
El BMW Serie 7 dispone de una completa oferta de motores diésel y gasolina muy potentes y con un rendimiento exquisito en todos ellos. Están acoplados a un cambio automático Steptronic firmado por ZF, de tipo convertidor de par y ocho relaciones y la tracción puede ser trasera o total xDrive, según versiones.
Hay dos motores de gasolina. En primer lugar, un V8 turbo 4.4 litros del 750i que entrega 449 caballos y 650 Nm de par entre las 1.800 y 4.500 rpm. Acelera de 0 a 100 km/h en 4’7 segundos y declara un consumo medio de 8 litros. En segundo lugar, la opción más potente es el M760Li xDrive, con un motor V12 6.6 litros con 610 caballos. Acelera de 0 a 100 km/h en 3’7 segundos y homologa un consumo mixto de 12’8 litros.
La oferta diésel queda encuadrada en tres motores de 6 cilindros en línea y 3.0 litros. El 730d entrega 265 caballos y 620 Nm de par entre 2.000 y 2.500 vueltas. Alcanza los 100 km/h en 6’1 segundos declara 4’7 litros de consumo medio. El 740d rinde 320 caballos y 680 Nm entre 1.750 y 2.250 rpm, acelera de 0 a 100 km/h en 5’2 segundos y consume 5’3 litros de media. Por último, el 750d monta un motor V8 con cuatro turbos que desarrolla 400 caballos y 760 Nm de par entre 2.000 y 3.000 vueltas. Es el motor diésel más potente de la historia de BMW. Acelera de 0 a 100 km/h en 4’6 segundos y homologa un consumo mixto de 5’9 litros.
Por último, BMW ofrece una opción híbrida con el 740e iPerformance. Se compone de un motor de gasolina y otro eléctrico. Juntos entregan 326 caballos y es capaz de hacer el 0 a 100 km/h en 5’3 y 5’5 segundos, según sea la carrocería larga o corta, y declarar un consumo medio de 2 y 2’5 litros, en función del tipo de tracción y carrocería.