Cuatro opciones con tres o cuatro cilindros
A la hora de ponerse al volante del Serie 1, uno puede pensar que se trata de una gran experiencia de conducción: un hatchback compacto hecho por los mismos ingenieros que han creado el Serie 3 y lo han mejorado durante décadas. El Serie 1 (al menos el normal) no sigue la misma fórmula, pero no deja de cumplir algo esencial: es un coche muy bueno para conducir sin renunciar de ningún modo a la comodidad al volante, y más con los cambios realizados al modelo 2015.
Con respecto al modelo original, este Serie 1 cuenta con componentes de aluminio en la suspensión que hace que el conjunto sea más ligero y reaccione a los movimientos del volante o los desniveles de la carretera con mayor soltura. Apenas hay ruidos o vibraciones al volante del coche, sobre todo en el caso de versiones de gasolina como el 116i (un tricilíndrico que sustituye al 114i de cuatro cilindros de la versión de 2012).
Por otro lado, los motores diesel del 116d o el 120d emiten un sonido mucho mayor a la vez que más vibraciones, sobre todo en el caso del 120d. Para los que quieran una experiencia de conducción mayor BMW tiene el M140i, una variante deportiva con 335 caballos. Otra pega es que, al ser tan ‘apretado’, no se ve muy bien al tener que maniobrar para detrás (problema que se soluciona con una cámara de visión trasera).
El Serie 1 recibe los motores más pequeños de toda la gama de BMW, siendo de los pocos que cuenta con motores diesel de tres cilindros y otros propulsores que utilizan también los Mini. Tanto los diesel como los gasolina tienen opciones de tres y cuatro cilindros – aparte está el seis cilindros turbo del M140i, que se sitúa en una escala aparte como todos los vehículos de M Performance.
El gasolina básico del Serie 1 es un tres cilindros turbo que puede desarrollar 136 caballos: se encuentra tanto en el 116i como en el 118i (además del Mini Cooper), siendo un motor excelente para un vehículo pequeño pero que sea capaz de despertar sensaciones al volante. El cuatro cilindros cuenta con control variable doble del árbol de levas (Doble VANOS) y control variable de válvulas: puede desarrollar 177 ó 218 caballos, siendo el que llevan el 125i o el Mini John Cooper Works.
El diesel de tres cilindros es, pese a las vibraciones que pueda emitir, un motor agradable que cuenta con suficiente potencia (116 caballos según cifras oficiales). En lo que al motor de cuatro cilindros se refiere, es un 2.0 que tiene hasta tres niveles de potencia: 150, 190 y 224 caballos – todos los motores de la gama BMW son de la familia TwinPower Turbo.