Un compacto que vuela a lo grande
El BMW Serie 1 se ha convertido, en apenas una década, en uno de los vehículos más populares dentro del segmento de coches compactos, sabiendo trasladar la fórmula de automóviles de alta calidad de acabado a un mercado donde no era tan habitual. No ha sido hasta los últimos años en los que los rivales de la marca de Múnich han decidido por añadir más tecnología y mejores acabados a sus vehículos, como el Audi A3, el Volkswagen Golf o el Mini Cooper, alternativa del Grupo BMW.
Como ha ocurrido con otros modelos con respecto a su primera generación, el Serie 1 se ha vuelto más grande con los años teniendo en cuenta la importancia de la comodidad para los pasajeros, sobre todo para los que van en la fila trasera de asientos. El aspecto exterior por delante no difiere mucho de modelos como el Serie 3 o el Serie 5, con unos faros delanteros similares y la parrilla que diferencia a los modelos de la marca de Múnich.
En la parte trasera los faros han crecido de tamaño con respecto a las generaciones anteriores de este modelo. De manera similar al Serie 3, el Serie 1 fue actualizado en 2015 después de que la generación actual saliera al mercado por primera vez en 2012. También al igual que la icónica berlina de la marca alemana, los cambios del modelo actual no son sólo externos, sino que se centran en el equipamiento (teniendo ahora más elementos de serie) y en su repertorio de motores.
El Serie 1 está disponible tanto con carrocería de tres puertas como de cinco puertas, siendo ésta 950 euros más cara en todas sus versiones – en cualquier caso la longitud no varía, siendo de 4,33 metros. Las diferentes versiones han dejado de estar relacionadas con el motor que llevan, sino que están alineadas para que haya concordancia con respecto al siguiente modelo de la gama, el Serie 2.