Repertorio habitual de TSI y TDI
Ponerse al volante del Touran es una tarea sencilla, pues de hecho se comporta de manera más similar a un turismo que a un vehículo de grandes dimensiones – hay que recordar que ha salido de la misma plataforma MQB de la que se han fabricado las versiones actuales del Golf y del Passat. Eso sí, el conjunto del Touran está más pensado y optimizado para circular por carreteras y autovías que otros coches de Volkswagen como el Golf o el Polo.
Parte de ello se nota en la caja de cambios, con una relación de marchas larga que hace que funcione muy bien por carretera y reduzca el consumo, pero que sea incómoda y haga falta hacer más cambios de marchas si se viaja por zonas más lentas – un inconveniente que también aparece en el Caddy, sin ir más lejos. La suspensión funciona de un modo similar, cubriendo los baches que pueda haber en el asfalto pero balanceándose en exceso si se circula por zonas de montaña.
En general es un coche que resulta fácil de conducir, siendo muy similar a otros monovolúmenes del mercado. Podría destacarse, por ejemplo, que estos vehículos del Grupo Volkswagen son más robustos que sus utilitarios, dando una sensación de mayor dureza en sus materiales.
Como podría esperarse de un Volkswagen, la oferta de motores consiste en un abanico de propulsores gasolina TSI y de motores diesel TDI. Existe un total de tres motores gasolina disponibles con diferente cilindrada y dos motores diesel diferentes, aunque en el segundo motor hay varios niveles de potencia que aumentan aún más el repertorio existente.
El primer motor TSI disponible para el Touran solo se encuentra en el primer nivel de acabado, siendo un 1.2 de 115 caballos. Más adelante aparece un 1.4 de 150 caballos que puede llevar tanto cambio manual de seis marchas como el cambio DSG de siete marchas y, por último, el 1.8 TSI de 180 caballos – que lleva de serie el cambio DSG con siete marchas.
A lo largo de toda la gama está presente el motor 1.6 TDI con cambio manual de seis marchas (aunque puede llevar el DSG de doble embrague) puesto que, al ser un coche pensado para viajes por carretera, es el motor que va a desempeñar esa tarea con el menor consumo de carburante posible. También está presente el 2.0 TDI, tanto con 150 caballos como con 190 caballos y cambio DSG de seis marchas en el acabado tope de gama.