IVA incluido Servicio en concesionarios oficiales Impuesto de circulación incluido Garantía incluida a nivel nacional Incluye matriculación
No hay cambios en la versión 2017
Las mejoras en conducción del Kia Carens son evidentes, empezando por una suspensión más dura que la del modelo anterior. Esto se traduce en una disminución del balanceo en la carrocería del coche, que aún sigue estando presente pero no resulta tan molesta como lo era antes o como sigue existiendo en otros vehículos de su categoría. Además, la dirección es regulable en tres modos, lo cual permite que el conductor decida qué nivel de asistencia quiere de la misma según sus gustos al volante o las necesidades del viaje que vaya a acometer.
Una de las identidades propias del Carens está en su baja altura respecto al suelo, inferior a la gran mayoría de compañeros de segmento. Dicha particularidad tiene un valor importante al volante, donde la respuesta en virajes es más contundente aportando más seguridad y haciendo que el balanceo mencionado no sea tan perceptible. Junto a su paquete de ayudas a la conducción, el Kia Carens puede presumir de ser un monovolumen muy equilibrado que combina habitabilidad y buenos acabados para postularse como una alternativa económica y dinámica en el segmento de los monovolúmenes compactos.
Tras su último y más reciente lavado de cara, los motores del Kia Carens no sufren modificaciones más allá de la inclusión del sistema Eco Pack en la mecánica diésel menos potente. Se sigue echando en falta más variedad en las motorizaciones de gasolina, mientras que en el caso del gasóleo las dos opciones cumplen todos los requisitos en términos de sensaciones y eficiencia.
Solamente existe un propulsor de gasolina dentro de la gama Kia Carens, aunque que en otros países hay una segunda opción. Esta mecánica única consta de un bloque de 1.6 litros y una potencia de 135 CV que se queda algo corto cuando el monovolumen va a pleno rendimiento y capacidad. El consumo del motor gasolina se sitúa entorno a los 6,5 litros cada 100 kilómetros.
Al contrario que con el gasolina, son dos los motores diésel disponibles en la gama del Carens, aunque los dos forman parte de la misma mecánica. Se trata del 1.7 CRDi turbodiésel de 115 y 141 CV respectivamente.
En el caso del de 115, en la última actualización sufrida por el Carens se incluye el llamado Eco Pack, un sistema que incluye elementos destinados a reducir los consumos gracias a un sistema Start&Stop, neumáticos de baja resistencia a la rodadura y unas relaciones de cambio revisadas.
Por su parte, con la variante más potente existe la posibilidad de disponer de un Kia Carens automático con una caja de cambios de doble embrague con levas situadas en la parte trasera del volante para su gestión.