Motor Mercedes-Benz SL

Gasolina 100%

En Carnovo:
  • IVA incluido
  • Servicio en concesionarios oficiales
  • Impuesto de circulación incluido
  • Garantía incluida a nivel nacional
  • Incluye matriculación

Opinión de Mercedes-Benz SL

Incluso el más modesto de los motores del SL va a tener una fuerza suficiente como para moverse con rapidez, teniendo unos tiempos en el 0 a 100 bastante buenos: 4,6 segundos en el SL 500 y 5,2 en el SL 400. No son cifras nada malas teniendo en cuenta que el peso en vacío de este coche es bastante elevado: el modelo más básico supera los 1.600 kilogramos mientras que el tope de gama, el SL 65 AMG, pesa 1.950 kilogramos sin contar con el piloto o la gasolina que lleve encima.

No sólo son rápidos, sino que en todas sus versiones es un coche que no cuesta mucho cogerle el tranquillo, sobre todo si se tiene en cuenta que la caja de cambios de nueve marchas automática viene de serie en los modelos básicos y funciona que da gusto. La dirección es fácil de maniobrar y la suspensión semiactiva funciona bien, aunque cuenta con una suspensión activa de manera opcional.

En las versiones AMG esta sensación de coche con dinamismo se ve aumentada, sea en el SL 63 AMG o en el SL 65 AMG – y todo eso sin ceder un ápice de confort, lo cual demuestra el trabajo excelente realizado en el coche. Es más ágil que un Bentley Continental GTC V8, aunque no tanto como el Porsche 911 Cabrio.

En el SL no hay lugar para otros motores que no sean de gasolina, algo lógico teniendo en cuenta que se trata de un deportivo de corte clásico, que cuenta con un gran legado de varias décadas de antigüedad. Por tanto, y al contrario que en otros modelos de Mercedes-Benz, no hay motores diesel, ni eléctricos ni híbridos.

Motores gasolina del Mercedes-Benz Clase SL

Por un lado, el modelo de entrada es el ‘modesto’ SL 400 que arranca ya con 367 caballos de potencia provenientes de un motor V6 y la caja de cambios automática de nueve marchas. Este es el motor que menos gasta de las cuatro opciones, con unas cifras oficiales que oscilan entre los 7,7 y los 7,9 litros a los 100. Después está el SL 500, que lleva un V8 de 455 caballos.

Por otro lado, están los modelos más salvajes del SL, comenzando por el SL 63 AMG con el V8 potenciado hasta los 585 caballos – hablamos ya de cifras mayores. En vez del cambio de nueve marchas, el SL 63 AMG lleva el cambio deportivo de siete marchas Speedshift MCT. Por último, el tope de gama es el SL 65 AMG: una bestia que bajo el capó oculta un V12 capaz de entregar 630 caballos.