IVA incluido Servicio en concesionarios oficiales Impuesto de circulación incluido Garantía incluida a nivel nacional Incluye matriculación
Confortable, sin emocionar
El cliente puede elegir entre una buena y equilibrada oferta de motores, compuesta por dos de gasolina y tres diésel, con potencias que oscilan entre los 116 y 190 caballos. Según versiones, el cambio puede ser manual de seis relaciones o automático de doble embrague, con siete u ocho velocidades. También hay versiones con tracción total 4Matic, además de tracción delantera.
Por un lado, está el B 180, con motor 1.3 de cuatro cilindros, 136 caballos y 200 Nm de par. Este motor se puede elegir con el cambio manual o automático 7G-DCT, de siete velocidades. El consumo medio es de 6,3 litros en ambos casos y las emisiones de CO2 oscila entre las 123 y 129 gr/km.
En segundo lugar, el mismo motor, pero con 163 caballos y 250 Nm de par del modelo B 200. Igualmente, se puede configurar con cambio manual o automático 7G-DCT y homologa un consumo medio de 6,3 litros y unas emisiones de 128 gr/km.
Ambos motores son de origen Renault.
La gama diésel la compone el B 180d, con motor 1.5 de 116 caballos y 260 Nm de par, también de origen Renault. Se puede elegir con cambio manual o automático 7G-DCT y declara un consumo medio de 4,8 litros y unas emisiones de entre 103 y 111 gr/km; le sigue el B 200d, con motor 2.0 de 150 caballos y 320 Nm de par. Está disponible solo con cambio automático 8G-DCT. Homologa un consumo medio de 5,1 litro y 115 gr/km de CO2.
En tercer lugar, el B 220d, con motor de 2.0 litros y 190 caballos y 40 Nm de par. Exclusivamente unido al cambio 8G-DCT, se puede elegir con tracción delantera o total 4Matic. La versión con tracción total equipa el cambio 7G-DCT. Declara un consumo mixto de 5,2 litros y 116 gr/km de CO2, con tracción delantera, y 7,5 litros y 153 gr/km de CO2 en la versión 4Matic.
En carretera, el Mercedes-Benz Clase B es un coche que saca a relucir su clara configuración de monovolumen para viajar. Aunque su diseño sea algo más deportivo, es un vehículo muy confortable, que destaca por una gran calidad de rodadura y buena insonorización, apoyado un cambio automático muy suave en las transiciones.
Las suspensiones tienen un tarado blando, con muy buena capacidad de filtrado, y la dirección es lenta, lo que invita a conducir con tranquilidad. Con respecto a las suspensiones, hay algo que criticar. De serie, las versiones menos potentes, y que serán las que ocupen el mayor porcentaje de ventas, equipan un sencillo esquema de barra de torsión, dejando las suspensiones multibrazo o paralelo deformable para las versiones diésel más potentes, B 200d y B 220d.
Realmente, el coche se muestra muy cómodo y casi nadie va a notar la diferencia, pero se hace raro que un coche de este nivel de precio y siendo un Mercedes-Benz renuncie al sistema de suspensión más complejo y que garantiza un mejor comportamiento. Hay otros dos tipos de suspensiones como opción, el tren de rodaje con altura rebajaba y otro con amortiguadores regulables, que permiten modificar la dureza.