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Dos caras para los motores de gasolina
El i20 cuenta con una suspensión blanda que acomoda a los pasajeros en la mayoría de las travesías (el único momento donde puede no ser cómoda es que la carretera esté muy rota). Aunque sea una configuración pensada para el confort y no para lanzarse a tomar curvas con el coche, lo cierto es que es capaz de defenderse puesto que el balanceo de la carrocería no es nada acusado, según asegura el medio británico Top Gear.
Eso sí, no es un coche tan divertido de manejar como el Fiesta, sino que se asienta en un equilibrio como coche funcional con el que desplazarse sin que el consumo sea un gran problema – aunque los motores de gasolina consumen algo más que los rivales. El medio Kilómetro 77 ha destacado el buen comportamiento del motor 1.4 atmosférico de 100 caballos por su suavidad, la ausencia de ruidos o vibraciones, aunque le falta capacidad para acelerar con respecto a competidores directos.
En general es un buen coche que se beneficiaría de motores de mayor potencia, siendo la recomendación de Top Gear el 1.0 T-GDI de tres cilindros, un propulsor que llegó meses después del lanzamiento del modelo. Este propulsor es también el tope de gama en su variante de 120 caballos.
La oferta de gasolina para el i20 se divide en dos: los atmosféricos MPI que salieron con el lanzamiento del coche y las versiones turboalimentadas que llegaron después, dándole opciones con las que pelear en igualdad de condiciones con los competidores de su segmento (que en su mayoría también tienen motores turbo). En lo que a los diesel respecta, tiene versiones de diferente cilindrada del motor CRDi de Hyundai: un 1.1 como motor de base y un 1.4.
Los 1.2 MPI de 85 caballos y 1.4 MPI de 100 funcionan bien y no emiten mucho ruido o vibraciones, pero el problema principal es la falta de fuerza que tienen – sobre todo en aceleración. Para ello Hyundai añadió a la gama el 1.0 T-GDI con 100 y 120 caballos.
Mientras que el 1.4 MPI puede tener una caja automática de cuatro velocidades, el 1.0 T-GDI de 120 caballos se beneficia de la caja de cambios manual de seis marchas.
La oferta de motores diesel del i20 se reduce al 1.1 CRDi de 75 caballos y el 1.4 CRDi de 90, siendo dos motores de tres cilindros – Hyundai tiene décadas de experiencia con este tipo de motores.
Por desgracia, el pequeño tricilíndrico produce una gran cantidad de vibraciones a baja velocidad por lo que, a pesar de tener una caja manual de seis marchas, no es capaz de conseguir los resultados del gasolina.