Una berlina muy cómoda y lujosa
El Hyundai Genesis es una berlina grande de casi 5 metros de longitud y representa la ambiciosa apuesta de la marca coreana para dar el salto al segmento de las berlinas premium. Por tamaño, está a medio camino entre el segmento E y el F, aunque por precio se acerca más al primero. Pretende atacar al BMW Serie 7, al Mercedes Clase S y el Audi A8, todos ellos con un precio mucho mayor que el Hyundai. También es una alternativa al Audi A6, BMW Serie 5 o Mercedes-Benz Clase E, aunque el Genesis es más caro que todos estos modelos con motorizaciones equivalente.
En cuanto a su diseño, el Genesis persigue la filosofía 2.0 Fluidic Sculpture, con la que pretende mostrar un vehículo elegante y sobrio, con líneas suaves. Al observarlo detenidamente, casi podría decirse que es una mezcla de varios modelos diferentes con los que pretende rivalizar, especialmente, alemanes. El frontal presenta algunos rasgos de Audi, como la gigante parrilla hexagonal y unos grandes faros que recuerdan ligeramente a los de la anterior generación del BMW Serie 7. Las ópticas cuentan con tecnológica LED que dibujan una firma luminosa en forma de C.
La vista lateral se asemeja bastante al Hyundai i40, sobre todo, en la caída del techo desde el pilar C hacia la zaga. Hay tres detalles que le dan dinamismo al coche. En primer lugar, la marcada línea de tensión une los grupos óticos delanteros con los traseros. Por otro lado, una segunda nervadura en el medio de las puertas y, por último, el pliegue en la parte inferior. Mientras, la trasera muestra un diseño que recuerda sensiblemente a un Lexus GS.
El interior del Genesis es muy lujoso, con materiales nobles de gran calidad, algo nada habitual en ningún otro modelo de la casa coreana. El salpicadero tiene un diseño muy alemán, con un trazado muy horizontal, una gran moldura de madera y todos los botones perfectamente ordenados. Como toda berlina de representación, el espacio para los pasajeros es muy generoso, especialmente en las plazas traseras, donde no faltan asientos con regulación eléctrica y un reposabrazos con mandos para controlar diferentes funciones.
El Hyundai Genesis es una berlina cómoda pero, también intenta transmitir un cierto comportamiento dinámico. Para ello, se sirve de un potente motor de gasolina de 315 caballos, asociado a un cambio automático de ocho relaciones. Pero sin duda, su principal activo es el gran equipamiento tecnológico que incluye de serie, superior al de muchos de sus rivales. De esta forma, cuenta con sistemas como el aviso de cambio involuntario de carril, detector de objetos en ángulo muerto, cámara de visión trasera y programador de velocidad activo.