Lujo y distinción
El interior del Genesis luce un nivel de calidad nunca visto antes en Hyundai. Se percibe una cierta inspiración alemana, en el diseño del salpicadero y la disposición de los diferentes botones. Tanto los asientos como el salpicadero y las puertas están revestidos con cuero Nappa de gran calidad. El nivel de ajustes es elevadísimo y hay también inserciones en aluminio que elevan la calidad del habitáculo, además de la gran moldura de madera que recorre de un extremo a otro el salpicadero.
En el cuadro de instrumentos hay una gran pantalla TFT de 7 pulgadas que proyecta toda la información relativa al coche de manera clara. También cuenta con un Head Up Display que proyecta la información más relevante en el parabrisas, de manera que no tengamos que apartar demasiado la vista de la carretera. En el centro del salpicadero encontramos la pantalla de 9’2 pulgadas del sistema multimedia, desde la que podemos gestionar los diferentes sistemas de manera táctil o desde un mando situado en la consola central. Debajo se encuentra el climatizador con varios pulsantes.
Como se espera en una berlina de representación, el espacio apra los pasajeros es muy generoso, especialmente si viajamos en las plazas traseras. Todos los asientos cuentas con regulación eléctrica, lo que facilita encontrar la posición más cómoda para cada persona. Detrás, además de hueco para las piernas, hay un espacio muy ancho, pero la altura al techo no es tan buena, debido a su diseño descendente. La plaza central de la banqueta trasera es menos aprovechable, ya que cuenta con un túnel de transmisión algo intrusivo para las piernas y el respaldo es duro. Éste se puede abatir, quedando un buen apoyabrazos con mandos para controlar algunas funciones del coche, como la climatización.
Pese a su tamaño, casi 5 metros, no dispone de un maletero muy grande. Tiene 493 litros, una capacidad inferior a la mayoría de sus rivales. cuenta con un mecanismo de apertura innovador. La tapa del maletero puede abrirse automáticamente cuando una persona en posesión de la llave se sitúe delante más de 3 segundos.