Ambiente de lujo y muy espacioso
El Audi Q8 presenta un interior que recuerda mucho al del Audi A8, Audi A6 y Audi A7. El salpicadero tiene unas líneas horizontales y rectas, perfectamente reconocible en la firma alemana. En la parte superior, se aprecian las rejillas de los aireadores que se prolongan hasta los extremos. Una moldura negra recorre el salpicadero de un extremo a otro, con un acabado brillante exquisito, en la que se integran dos pantallas táctiles.
El cuadro de instrumentos es digital, mediante el Audi Virtual Cockpit. Se puede configurar de dos maneras, dando protagonismo al cuentavueltas y velocímetro o al navegador. El volante, deportivo y forrado en piel, tiene un tamaño y un tacto muy bueno y puede estar achatado en la zona inferior, según el acabado. Tiene tres radios e incluye los mandos para controlar las ayudas a la conducción y el sistema multimedia, bien ordenados.
Volviendo al salpicadero, la pantalla superior es de 10,1 pulgadas y proyecta el contenido el sistema de información y entretenimiento MMI Navegation Plus, que incluye todas las opciones posibles de conectividad, navegador, los diferentes sistemas de seguridad o los modos de conducción. La inferior es de 8,6 pulgadas y sirve para la gestión del climatizador y como touchpad. Todos los sistemas se pueden controlar también por voz.
Mención aparte merece el nivel de calidad del habitáculo. Está revestido con materiales de primera calidad, con superficies acolchadas, goma, plásticos blandos muy agradables al tacto, piezas metálicas y cuero. Sobresale por encima de todo el acabado de las dos pantallas porque, aunque son táctiles, emite un sonido al realizar una acción y crea la sensación de estar pulsando una tecla.
En un coche de casi cinco metros, es lógico esperar una buena habitabilidad, pero a veces, el diseño coupé penaliza el espacio para los pasajeros. Esto no ocurre en el SUV de Audi, donde las plazas traseras son muy cómodas y holgadas, especialmente, en el espacio para las piernas. Opcionalmente, la banqueta trasera se puede deslizar hasta en 10 centímetros para ganar espacio en el maletero. En su posición más retrasada, el espacio para las piernas es, incluso, mayor que en el Audi Q7. También se pueden reclinar los respaldos en tres posiciones.
El maletero del Audi Q8 no es del todo malo, porque ofrece 605 litros. Es una capacidad buena para ser un todocamino coupé pero, teniendo en cuenta sus dimensiones, podría decirse que se queda justo. Es más grande que el de algunos rivales, como le BMW X6 o el Range Rover Sport, y más pequeño que el del Mercedes-Benz GLE Coupe y el Porche Cayenne. Por tanto, lo ubicamos en una posición intermedia.
De serie, cuenta con portón eléctrico y, opcionalmente, se puede abrir pasando el pie por debajo del paragolpes. Equipa ganchos, argollas y redes para sujetar la carga y, de forma opcional, se puede incluir unos brazos de aluminio con raíles para organizar mejor la carga.