IVA incluido Servicio en concesionarios oficiales Impuesto de circulación incluido Garantía incluida a nivel nacional Incluye matriculación
Clásico, aunque modernizado
El interior del Montero es muy de la vieja escuela, con una instrumentalización muy tradicional pero que muestra niveles de tecnología similares a los de otros coches de hoy día. El cuadro de mandos y todo el habitáculo es sencillo y está repleto por plásticos duros en muchos sitios, aumentando de esta manera la resistencia de unos materiales. También se puede destacar la alta posición de conducción, más incluso que en otros todoterrenos.
En términos de infoentretenimiento no es el más actualizado ni el más sofisticado, pero tampoco es que le haga falta. Aún así cuenta con una pantalla de infoentretenimiento y multimedia, la misma que también se puede encontrar en el ASX. Se utiliza de forma sencilla y clara, teniendo justo por debajo los mandos del climatizador. Además de la información habitual que suelen darse en ordenadores de a bordo, añade datos interesantes como la altitud o la presión atmosférica, en caso de llevarlo a la montaña.
Aunque es un coche diseñado para ser duro por naturaleza, los asientos delanteros de cuero son una grata bienvenida y reciben a sus pasajeros con comodidad. Por su parte, los pasajeros de la fila trasera de asientos no deberían tener problemas para viajar teniendo en cuenta las dimensiones del Montero – como es lógico, les es más fácil subirse al cinco puertas que al tres puertas.
En su versión de tres puertas el Montero cuenta con un maletero de 415 litros, pero en el de cinco puertas aumenta hasta unos colosales 860 litros (con 5 plazas, aunque puede llevar 7). Con estas cifras le gana por goleada al Infiniti QX70, al BMW X5, al Mercedes GLE Coupé, al Volvo XC90, al Porsche Cayenne e incluso al Land-Rover Range Rover Sport. El único que se le escapa es el Land-Rover Discovery con sus descomunales 1.230 litros.