IVA incluido Servicio en concesionarios oficiales Impuesto de circulación incluido Garantía incluida a nivel nacional Incluye matriculación
Gran espacio y buena calidad
Una vez sentados en el puesto de conducción, notamos que estamos en una posición elevada que nos permite una gran visibilidad de todo lo que nos rodea. Al principio, podremos dudar si estamos en un Skoda o en un Volkswagen porque el diseño del habitáculo recuerda, en gran medida, a la de algunos modelos de la marca matriz del grupo alemán. El salpicadero tiene un diseño claramente horizontal, con molduras de plástico muy agradables al tacto, y unas bocas verticales del aire acondicionado que rompen esa horizontalidad. A diferencia de otros modelos, la pantalla del sistema multimedia ahora queda en una posición más elevada y más cercana a la vista del conductor.
El sistema de infoentretenimiento cuenta con sensor de proximidad y su manejo es muy intuitivo y sencillo. Hay cuatro diferentes, según el nivel de equipamiento: Swing, Bolero, Amundsen y Columbus, con pantallas de 6’5 a 8 pulgadas. Se puede utilizar como cualquier smartphone, ampliar o reducir la imagen con los dedos y puede contar con conexión a internet y la opción de ver el contenido del navegador a través de Google Earth. Por otro lado, podemos encontrar varios huecos portaobjetos a lo largo del habitáculo y también una superficie de recarga inalámbrica mediante inducción para cargar el móvil. La sensación de calidad que se percibe es bastante buena, el nivel de ajuste es elevado y la ergonomía, como ocurre siempre en Skoda, está muy lograda.
Las plazas delanteras son muy amplias y cómodas pero, donde destaca este SUV compacto es en la fila posterior, donde pueden viajar cómodamente tres adultos. El espacio para las piernas es muy grande, así como la altura libre al techo para la cabeza y el espacio para los hombros. Además, la banqueta se puede deslizar hasta 18 centímetros, ya sea para ampliar la capacidad del maletero o bien para desplegar la tercera fila de asientos, que es opcional y vale 800 euros. El espacio para la tercera fila no es muy holgado, pero es más o menos como en otros modelos de siete plazas. Un detalle que le resta versatilidad al Kodiaq es que los asientos posteriores no son individuales sino que presentan la configuración normal de un turismo, pero lo compensa la posibilidad de reclinar los respaldos para una posición más cómoda.
Uno de los puntos positivos del Kodiaq. Ofrece nada menos que 720 litros en la configuración de cinco plazas. En caso de elegir la versión de siete plazas, la capacidad se reduce a 630 sin los asientos desplegados. Con las siete plazas disponibles, nos quedan 270 litros. Es, por tanto, uno delos mejores maleteros del segmento. Cuenta también con accesorios como ganchos una linterna, una toma de 12 voltios y un sistema automático para abatir los asientos.