Un deportivo para todos los días
El Toyota GR Supra monta un motor de gasolina de BMW con 340 caballos. En otros mercados, habrá versiones de cuatro cilindros con menos potencia, pero a España solo llegará el más potente. Está asociado a una caja de cambios automática ZF de ocho relaciones, que funciona por convertidor de par, uno de los mejores cambios automáticos del mundo. Traslada toda la potencia al eje trasero.
El motor es un seis cilindros en línea y 3.0 litros de cilindrada, sobrealimentado por turbo. Desarrolla 340 caballos y 500 Nm entra las 1.600 y 4.500 vueltas y se estira hasta casi las 7.000 revoluciones por minuto. Acelera de 0 a 100 km/h en 4,3 segundos y la velocidad máxima está limitada a 250 km/h. El consumo medio homologado es de 7,5 litros y declara unas emisiones de CO2 de 170 gr/km.
Aunque comparte chasis con el BMW Z4, los ingenieros de Gazoo Racing han trabajado para que la puesta a punto del Supra sea diferente a la del modelo alemán. El deportivo japonés ofrece un comportamiento muy deportivo que garantiza una elevada dosis de diversión al volante. Pero no se puede decir que sea un deportivo extremo. Es un coche perfectamente utilizable en el día a día, lo cual no significa que sea cómodo, pero tampoco radical.
Tiene un comportamiento deportivo pero moderado. Con las ayudas electrónicas, es imposible buscarle las cosquillas pero, desconectando todos los sistemas de ayudas a la conducción, es fácil ver cómo el eje trasero patina, al pisar a fondo en la salida de una curva. En general, tiene unas reacciones neutras y es fácil corregir la trayectoria cuando se produce un sobreviraje. En el comportamiento deportivo ayuda también la dirección, muy precisa, directa e informativa.
Monta unas suspensiones que no son excesivamente duras sino, más bien, blandas, para tratarse de un deportivo de más de 300 caballos. No se perciben balanceos y se muestra muy ágil en los pasos por curva, pero sin ser tan plano como otros rivales. Una pega importante son los frenos Brembo de cuatro pistones que, cuando se les exige demasiado, pierden efectividad muy rápido.