Muy alemán
El Toyota GR Supra ha sido desarrollado en colaboración con BMW. Esto significa que comparte el chasis con el nuevo BMW Z4 y el motor, equipamiento tecnológico y elementos del interior también son de origen alemán. Solo con echar un vistazo al habitáculo, salta a la vista la procedencia germana, ya que encontramos varios componentes que ya hemos visto en diferentes modelos de la marca bávara.
El salpicadero tiene un diseño muy horizontal y está gobernado por una pantalla táctil de tipo flotante de 8,8 pulgadas, para visualizar todo el contenido del sistema multimedia. La pantalla se puede gestionar desde un mando giratorio en el túnel central, igual que el famoso mando iDrive de BMW. Junto a este mando, se ubica la palanca del cambio automático, cuyo diseño no deja lugar a dudas, acerca de su origen alemán. La consola central, pequeña, alberga todos los mandos del climatizador. El volante deportivo y multifunción y las levas del cambio también son de la marca alemana.
Detrás del volante, tenemos un cuadro de instrumentos digital que muestra, de forma destacada, el cuentarrevoluciones, y numerosos indicadores. Los asientos son muy cómodos y ofrecen un gran agarre. Además, cuentan con calefacción y están tapizados en cuero. En general, la sensación de calidad del habitáculo es muy elevada, con empleo de materiales de muy buena calidad, gracias a la colaboración de BMW. La única pega que se le puede poner es la falta de huecos para dejar objetos, si bien, no es un aspecto a tener en cuenta en un deportivo.
El Toyota GR Supra es un auténtico biplaza y no un 2+2 como la anterior generación. Los dos pasajeros pueden viajar con espacio suficiente y cómodos. Además, la posición de conducción es muy baja y deportiva. Los asientos tienen ajuste eléctrico de muchas posiciones, incluido las aletas para agarrar más o menos.
El maletero ofrece una capacidad escasa, 290 litros, aunque no está mal para un deportivo de su tamaño. No cuenta con doble fondo ni otros elementos de equipamiento propios de coches normales y la boca de carga que queda al abrirlo es pequeña. Pero no es un coche pensado para viajar.