IVA incluido Servicio en concesionarios oficiales Impuesto de circulación incluido Garantía incluida a nivel nacional Incluye matriculación
Todos los gustos tienen cabida
Uno ve las dimensiones del Ford S-Max y enseguida se imagina a un mastodonte cuyo manejo y comportamiento dinámico brillan por su ausencia, pero no sucede así. Los compañeros de km77 valoran que la respuesta de las suspensiones y el tacto de la dirección contribuyen a conseguir unas buenas sensaciones al volante incluso en los terrenos más complicados para un vehículo de su categoría. Se puede decir que llegados a este punto y teniendo en cuenta su gran tamaño, la movilidad del S-Max es más propia de un turismo que la de un monovolumen.
El otro punto que juega en favor del S-Max es su excelente aislamiento frente al ruido, tanto por parte del motor, que apenas suena, como el de la resistencia al aire cuando circulamos a gran velocidad. Tanto es así que incluso habrá más de uno que de repente vea que está yendo algo más rápido de lo que debería al ver que el sonido de la penetración aerodinámica es realmente tenue.
La oferta de motores en el Ford S-Max es muy variada al tratarse de uno de los vehículos más polivalentes que ofrece el fabricante estadounidense en nuestro país. De esta forma, el consumidor puede acceder a dos propulsores de gasolina y tres diésel, conformando así una oferta muy completa y adecuada al uso que se le pueda dar a este monovolumen.
Las dos especificaciones de motor gasolina que están disponibles con el Ford S-Max pertenecen a la exitosa familia EcoBoost, para muchos el mejor motor gasolina del mercado. La mecánica de acceso la forma un bloque de 1.5 litros que consigue dar una potencia máxima de 160 CV y 240 Nm de par motor. El consumo estimado por Ford para este motor es de 6,5 litros cada 100 kilómetros.
Por encima del 1.5 se encuentra el 2.0 EcoBoost, el propulsor más potente de todo el Ford S-Max gracias a sus 240 CV. Que no te amilane ver semejante cifra de potencia, ya que su entrega es muy lineal y permite realizar una conducción bastante sosegada. Sin duda es un motor muy recomendable para moverse por ciudad, ya que su consumo urbano estimado es 10,3 litros, mientras que el consumo combinado se queda en 7,9 litros a los 100. Monta caja de cambios automática de 6 velocidades.
El abanico de opciones diésel es mayor que en la gasolina, aunque todos los motores pertenecen a la misma familia 2.0 Duratorq TDCi. La primera opción es el motor con 150 CV de potencia y se puede escoger con transmisión manual o sistema Powershift, ambos con 6 velocidades, así como optar por tracción a 2 y cuatro ruedas. Su consumo es el más contenido de toda gama con 5 litros cada 100 kilómetros. Por encima se sitúa el motor de 180 CV y el bi-turbo, que se va hasta los 210 CV. El de 180 CV se puede montar con tracción integral, mientras que el de 210 CV sólo se comercializa con la caja de cambios automática. Los consumos oscilan entre los 5 y los 5,8 litros, dependiendo de la transmisión y el sistema de tracción escogido.