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Una mansión con ruedas
Al volante del BMW X7, se respira una sensación de lujo de alto nivel. El diseño del salpicadero es muy similar al de otros modelos de la marca. Tiene una pantalla de 12,3 pulgadas sobreelevada, que se puede manejar de forma táctil, por voz, por gestos, desde los mandos del volante y desde el mando iDrive que encontraremos en el túnel central. Es de las mejores pantallas del mercado por su funcionamiento y, desde ella, se puede controlar muchas funciones del coche.
Debajo de la pantalla tenemos las tomas de ventilación y los controles del climatizador, rodeados por una moldura cromada. Tras el volante, se ubica un cuadro de instrumentos completamente digital, similar al que tiene el BMW Serie 8 y el BMW Serie 3. En el túnel central, además del mando iDrive, encontramos la palanca del cambio y los controles de los modos de conducción.
La calidad de los materiales que revisten todo el habitáculo es altísimo. Hay varios tipos de maderas para las molduras del salpicadero y las puertas y para la que cubre toda la consola central del túnel. También hay inserciones de aluminio que embellecen el conjunto, como los marcos de los aireadores y en el volante. Todo lo que se toca, transmite calidad y, en general, la sensación es la de estar en un vehículo muy lujoso.
El BMW X7 es un SUV grande de siete plazas. Opcionalmente, la segunda fila se puede configurar con dos asientos individuales, en lugar de tres, para gozar de mayor confort y espacio. La tercera fila es bastante aprovechable, lógicamente sin el mismo confort que en la segunda, pero pueden viajar dos adultos perfectamente. De serie, tiene climatizador de dos zonas, por lo que la segunda fila cuenta con un panel de mandos para el climatizador.
El maletero tiene un gran volumen de carga con 750 litros, aunque muy lejos de los 890 litros del Audi Q7. Si se utilizan las siete plazas, el espacio se reduce a 326 litros, que no está mal, y si abatimos las dos filas de asientos traseras, queda un espacio de 2.120 litros. El portón se abre en dos secciones, la parte superior hacia arriba y la inferior hacia abajo. El umbral queda muy bajo, pero es difícil llegar hasta el fondo con la parte inferior abierta.