IVA incluido Servicio en concesionarios oficiales Impuesto de circulación incluido Garantía incluida a nivel nacional Incluye matriculación
Se echa en falta una opción más potente, no obstante, su eficiencia es destacable.
Sin duda alguna, si algo puede proporcionar a su conductor y pasajeros el Renault Captur es confort de marcha. Este coche está fuera de cualquier definición de vehículo deportivo en pos de la facilidad de conducción y de la comodidad de sus ocupantes, así como del espacio interior comentado anteriormente. De todas formas, su balanceo en curva es reducido y, según Autobild, Renault ha conseguido un buen compromiso entre efectividad y comodidad. En cualquier caso, si lo que estás buscando es un coche para carreteras reviradas, debes saber que el Captur no es el que estás buscando.
Al estar situado a una mayor altura libre del suelo en comparación con el Clio, se puede afirmar con rotundidad que su visibilidad es mucho mejor que la de éste desde el interior del vehículo en todos los ángulos. El ruido de rodadura hace presencia en su habitáculo a velocidades elevadas, pero no es para nada molesto. Además, la filtración de irregularidades del asfalto no es todo lo buena que debería, y mucho menos teniendo en cuenta que estamos valorando un vehículo que, aunque no tenga las capacidades propias de un todoterreno (ni siquiera ofrece la opción de una tracción 4x4), sí que podría camuflar sus deficiencias en este sentido.
Por otra parte, uno de los terrenos en los que el Captur saca peor nota es en el tacto de su cambio de marchas manual al sentirse sus accionamientos como blandos y poco precisos. No pasa esto con su transmisión automática EDC, la cual resulta suave y, a su vez, rápida.
El Renault Captur está disponible con cuatro motorizaciones diferentes, pero una cosa parece clara sobre las demás: todas priorizan la frugalidad en el consumo de combustible por encima de las prestaciones. Tanto es así que incluso siendo un coche pensado para circular cómodamente y a un ritmo tranquilo, sí que pueden existir situaciones en las que se eche en falta algo más de potencia (aun incorporando un pequeño turbo todas las mecánicas a las que se puede asociar).
Los escalones de acceso a la gama están formados por un motor gasolina 0.9 TCe con solo tres cilindros que tiene una potencia de 90 CV, al igual que el 1.5 dCi de gasóleo. El primero registra un consumo medio homologado de 5,1l/100km, por los 3,7l/100km con los que se conforma la alternativa diésel.
Si eres de los que prefiere un poco más de fuerza al pisar el acelerador (vuelvo a repetir que el Captur no es un coche que asombre en este aspecto en ninguna de sus variantes) es mejor que optes por el 1.2 TCe de 120 CV o por el mismo bloque diésel del que acabamos de hablarte, pero esta vez con 110 CV de potencia. Los consumos mixtos de estos dos son de 5,5l/100km y de 3,7l/100km, lo que supone que estamos ante un coche en el que moverte te saldrá muy económico.