Hasta cinco opciones mecánicas
La marca francesa ha querido transformar por completo el Peugeot 508, pasando de ser una tradicional berlina para autovía a una berlina más deportiva, con sensaciones cercanas a las de un gran turismo. Y lo ha conseguido gracias, en parte, a un excelente chasis que hace que el comportamiento en carretera sea muy dinámico, hasta el punto, que puede decirse que el modelo francés es el nuevo referente del segmento en este aspecto, al menos entre modelos con tracción delantera.
A estas sensaciones deportivas contribuyen también la particular posición de conducción, baja, con las piernas bastante estiradas y con el volante pequeño y achatado. Si a esto le añadimos unos motores con una respuesta muy buena en recuperaciones, especialmente las versiones más potentes, la sensación es la de estar conduciendo un coche realmente deportivo.
En carreteras de curvas, su hábitat natural donde se muestra más eficaz y se le puede sacar todo el jugo a su chasis, se muestra muy plano en curvas, pese a que en esta nueva generación renuncia a la suspensión de doble triángulo en el eje delantero por un convencional esquema McPherson. Detrás, conserva un esquema multibrazo. Si se opta por la suspensión pilotada opcional, el comportamiento mejora aún más, absorbiendo cualquier irregularidad de la carretera y sin inercias en las curvas.
El nuevo Peugeot 508 está disponible, por el momento, con cinco tipos de motorizaciones, tres de ellas de gasóleo y dos de gasolina. A mediados de 2019, está prevista que llegue una mecánica híbrida enchufable compuesta por un motor de gasolina de 180 caballos y otro eléctrico de 105, que entregará una potencia conjunta de 225 caballos. Todos los motores son de cuatro cilindros y van asociados a un cambio automático EAT8, salvo el diésel menos potente, que se ofrece también con un cambio manual de seis relaciones.
La oferta diésel está compuesta por tres opciones. En primer lugar, un bloque 1.5 BlueHDi de 130 caballos y 300 Nm de par a partir de las 1.750 vueltas, con un consumo medio de 3,8 litros. Por otro lado, ofrece un bloque 2.0 BlueHDi con 160 y 400 Nm de par desde las 2.000 vueltas y un consumo medio de 4,5 litros. Por último, el mismo bloque de 2.0 litros entrega también 180 caballos y 400 Nm, con un consumo mixto de 4,7 litros.
En gasolina, encontramos dos motorizaciones. De un lado, el 1.6 PureTech con 180 caballos y 250 Nm de par a partir de las 1,750 vueltas, con un consumo medio de 5,4 litros. De otro, el mismo 1.6 PureTech pero con 225 caballos y 300 Nm de par desde las 1.900 vueltas, con un consumo medio homologado de 5,7 litros.