Compartimentos en cada esquina del Zafira
En su habitáculo el Zafira se caracteriza por tener una cantidad interesante de compartimentos donde meter objetos importantes o útiles para un viaje: hasta 30 huecos repartidos por el interior. Los materiales utilizados en el salpicadero o los asientos son de calidad, además de contar con un diseño deportivo para los asientos pese a que se trata de un monovolumen pensado para transportar una gran cantidad de personas o equipaje más que para correr al volante.
Con la unión de Opel OnStar y el sistema IntelliLink se resuelven casi todas (si no todas) las necesidades que puede tener el conductor medio en un coche actual, ya que con OnStar se añade también conexión Wi-Fi con 4G. A esta señal se pueden añadir hasta siete dispositivos diferentes, aunque sufre cuenta con un ligero problema en este apartado: no cuenta con ningún puerto USB en el caso de que un móvil se quede sin baterías.
Sus 4,666 metros de largo lo constituyen como uno de los monovolúmenes más largos de todo el mercado, además de ser el más ancho con 1,928 metros. Por tanto, el hueco necesario para alojar a siete pasajeros está más que asegurado, siendo ayudado por elementos como techo solar o el sistema FlexRail, en el que pueden desplazarse objetos de un lado a otro gracias a un raíl de aluminio. Eso sí, detrás no hay mucha iluminación o ventilación, lo cual no juega a su favor.
En su configuración de cinco plazas el Zafira cuenta con 710 litros y con siete plazas esa cifra se reduce a 152 litros – aunque si se abaten ambas filas el espacio es de 1.860 litros. Resultan cifras curiosas dado que en general sus rivales ofrecen menos espacio en configuración de cinco plazas, pero más espacio con siete plazas, lo que da a pensar que el Zafira está pensado para llevar más a personas que grandes cantidades de equipaje.