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Un SUV con clara vocación familiar y muy cómodo
El segmento de los SUV compactos medianos incorpora un nuevo modelo. Se trata del Opel Grandland X, construido sobre la misma plataforma del Peugeot 3008, con el que comparte muchos otros elementos de desarrollo, ya que la marca alemana forma parte del grupo PSA Peugeot-Citroën. Mide 4’47 metros y ataca de lleno al Seat Ateca, el Nissan Qashqai, el Renault Kadjar, el Hyundai Tucson, el Ford Kuga o el Mazda CX-5, además del propio Peugeot 3008.
El diseño del Opel Grandland X muestra algunos rasgos que lo asimila a otros modelos de la marca, como el Astra y el nuevo Insignia Grand Sport. El frontal recuerda mucho a la berlina, en la forma de la parrilla central, con una serie de elementos salientes que le dan tridimensionalidad, y los grupos ópticos que pueden incluir luces matriciales LED, con iluminación inteligente. El capó es elevado, plano y presenta tres nervios bien marcados. No pueden faltar las protecciones en negro en los paragolpes, en los pasos de rueda y en los bajos de las puertas.
Otro elemento cada vez más presente en los crossovers es la posibilidad de pintar el techo en color negro, como ofrece el Grandland X. De la vista de perfil, llama la atención también el elemento cromado que recorre la superficie superior del marco de las ventanillas y que hace de separador entre el techo y el resto de la carrocería, creando un efecto de techo flotante. La parte posterior recuerda más al Astra en la forma de las ópticas, la luneta es pequeña y hay una notable superficie de plástico negro en la zona inferior, rematado por un difusor con doble salida de escape.
El interior luce unas líneas convencionales, con pocos botones, únicamente los del climatizador en la parte inferior de la consola central y varios comandos para algunas funciones de conducción. La pantalla, de 7 u 8 pulgadas según el nivel de equipamiento, concentra el resto de funciones del coche: navegador, audio, teléfono e, incluso, puede proporcionar una red de wifi. La habitabilidad en las plazas traseras es muy buena y el maletero ofrece unos buenos 514 litros.
Inicialmente, la gama de motores está compuesta por uno de gasolina de 130 caballos y otro diésel con 120 caballos. Ambos propulsores son del Grupo PSA y son suficientes para mover el SUV alemán en la mayoría de situaciones, aunque sin esperar reacciones muy dinámicas. En cuanto a comportamiento, prioriza el confort, siendo un coche muy apropiado para viajar en familia.