Cinco niveles de acabado
Dado que la construcción del XE es muy similar a la del XF, tanto en las formas como en los materiales utilizados, es lógico ver que ambos tengan una puntuación similar en el test Euro NCAP con cinco estrellas. Aunque no cuentan con la mejor puntuación en general, se mantienen en la parte alta en los cuatro apartados con respecto a sus rivales tanto en Europa como en Japón.
Por ejemplo, en la categoría de protección a pasajeros adultos el XE logra un 92%, lo mismo que el XF y por encima de otros coches como el Lexus RX o el Kia Sportage (aunque por debajo del Honda Jazz o el Toyota Avensis. En protección a pasajeros infantiles no sale tan bien parado con un 82%, aunque no a mucha distancia de sus rivales (con ese mismo porcentaje está también el RX mientras que el Sportage tiene un 83% y el XF, de mayores dimensiones que el XE, un 84%.
En la categoría de protección a peatones cuenta con un 81% que supera a la mayoría de su segmento mientras que en la de equipamiento de seguridad cuenta con un 82% - en 2015, los únicos coches de tamaño similar con más puntuación fueron el Volvo XC90 y el XF. Además de los elementos básicos, el XE cuenta de serie con asistente de frenada de emergencia, luces de emergencia para frenadas bruscas y cierres de seguridad infantil accionables a distancia.
El Jaguar XE cuenta con cinco niveles de acabado, de manera a otros modelos como el XF y el XJ: el nivel de entrada es el Pure, seguido del Prestige, R-Sport, Portfolio y el XE S como tope de gama. La elección de motores delimita en gran medida el acabado a escoger, pues está organizado de una forma distinta a los modelos de mayor tamaño de Jaguar.
De entrada el XE cuenta con control de crucero, limitador de velocidad, ayuda de arranque en pendiente, freno de mano eléctrico, reparto de par en curva, conexión Bluetooth y sistemas como el InControl Protect o el JaguarSense. En materia de seguridad incorpora asistente de frenada de emergencia, cierres de seguridad infantiles, airbags delanteros laterales, frontales y de cortina, entre otros elementos.
Tanto el Prestige como el Pure son los acabados con los que se puede escoger el motor diesel de entrada, teniendo elementos como indicador de desgaste de las pastillas de freno o sensor de baja presión de neumáticos. El equipamiento de infoentretenimiento y seguridad es el mismo que el acabado Pure.
Salvo en el modelo de entrada y el tope de gama, el R-Sport está presente en toda la gama de motores del XE. El acabado R-Sport incluye llantas de 18 pulgadas, asientos deportivos, kit de carrocería R-Sport (que cuenta con distintivos especiales, branquias laterales, parachoques deportivo y alerón trasero) y acabados en el color especial Etched Aluminium.
El acabado más ‘Premium’ de la gama del XE está disponible en los mismos motores que el R-Sport, añadiendo algunos elementos más con respecto al Prestige. También tiene llantas de aleación de 18 pulgadas como el R-Sport, además de asientos de piel Windsor, faros bixenón, lavafaros eléctrico y rejilla frontal con contorno cromado.
El tope de gama (disponible con el 3.0 V6 Supercharger) también tiene un marcado carácter deportivo, teniendo tanto asientos deportivos como el kit de carrocería S con alerón trasero, faldón trasero y parachoques frontal S. Las pinzas de freno son de color rojo, los faros bixenón, el volante de piel y cuenta con el sistema Adaptive Dynamics para mejorar el manejo.