Más sofisticado que su pariente nipón
En lugar del habitáculo espartano y ausente de lujos del MX-5, Fiat ha preferido instalar toda clase de comodidades y detalles de calidad en el interior del 124 Spider, aportándole de este modo un toque más italiano. La piel abunda en los asientos y tanto el propio salpicadero como las puertas están repletos de detalles a juego, dando una gran sensación de confort pese a lo reducido que es el habitáculo al ser un deportivo de pequeñas dimensiones.
La capota de lona apenas tarda unos segundos en desplegarse y plegarse, teniendo un flujo de aire muy suave de manera que no hace mucho ruido – eso sí, hace más ruido que en el Audi TT Roadster o el BMW Serie 2 Cabrio. A nivel de infoentretenimiento ofrece sistema multimedia con pantalla táctil y mandos para el aire acondicionado o calefactar los asientos.
Teniendo el mismo habitáculo que el Mazda MX-5, el 124 Spider sufre del mismo problema: es muy pequeño, pudiendo dar problemas a personas que midan más de 1,85 metros de altura – ni siquiera hay un metro entre la base del asiento y el techo. Aunque hay poco espacio, uno puede sentirse más cómodo en el 124 Spider que en el MX-5 debido a las diferencias a la hora de concebir el interior entre ambos.
Es obvio que este coche no va a tener un gran maletero, pues la parte práctica no es el punto fuerte de los deportivos: el 124 cuenta con 140 litros, superando al MX-5 (130 litros), al Alfa Romeo 4C (110 litros) o incluso superdeportivos como el Honda NS-X (110 litros) o el Audi R8 (112 litros). Aún así el Mercedes-Benz SLC, siendo apenas un poco más largo y más ancho que el 124 Spider, es capaz de conseguir 225 litros mientras que el Audi TT Coupé llega hasta los 292 litros.