Oferta muy variada, especialmente en diésel
El Audi A6 es un coche enfocado a realizar lardos viajes por autopista y disfrutar de ellos. Es una berlina que trata de priorizar siempre el confort por encima de reacciones dinámicas, aunque no renuncia a ellas. Su tamaño y peso (cercano a los 1.900 kilos) hacen así lo confirman. Las suspensiones tiran a blandas, pero sujetan correctamente la carrocería, impidiendo balanceos excesivos.
Opcionalmente, se puede equipar unas suspensiones neumáticas, cuya dureza se puede modificar. Con estas suspensiones, el A6 es un vehículo tremendamente cómodo en cualquier tipo de vías, con una gran capacidad para absorber las irregularidades del asfalto. Es posible entrar en un terreno muy bacheado sin que los pasajeros se muevan apenas.
A través del Audi Drive Select se puede seleccionar varios programas de conducción que afectan al funcionamiento de la dirección, las suspensiones (si son regulables), el cambio, cuando es automático, y la respuesta del motor. los modos de conducción son Comfort, Auto, Dynamic, Efficiency e Individual. El modo Confort está pensado para viajar por autovía y permite acentuar la comodidad a bordo de los pasajeros. Con el modo Dynamic, la dirección se endurece, la respuesta del acelerador es más viva y el cambio apura más las marchas. Esto, unido a la impecable capacidad para traccionar del sistema de tracción Quattro, dota al Audi A6 de un cierto tacto deportivo al adentrarnos en carreteras de curvas.
Además del cambio manual de seis marchas, puede montar un cambio S Tronic de doble embrague o un Tiptronic de convertidor de par, según versiones. Ambos funcionan muy bien, aunque el Tiptronic es más suave, con unos saltos de marcha casi imperceptibles. El S Tronic hace los cambios muy rápidos, pero se perciben ligeros tirones, sobre todo, al circular a baja velocidad. Es una transmisión excelente para modelos deportivos, pero al tratarse de una berlina que prioriza el confort de marcha, el Tiptronic se antoja más adecuado.
Será difícil no encontrar un motor adecuado para cada conductor, ya que el A6 dispone de una amplia gama de opciones. Las potencias oscilan entre los 150 y los 320 caballos. La tracción puede ser delantera o a las cuatro ruedas, según versiones, y el cambio puede ser manual de seis velocidades, automático S Tronic de doble embrague y siete relaciones o automático Tiptronic de convertidor de par y ocho marchas.
En este caso, Audi propone dos opciones. Por un lado, un 1.8 TFSI de 190 caballos, capaz de acelerar de 0 a 100 km/h en 7’9 segundos y un consumo medio de 5’9 litros con cambio manual y 5’7 litros con cambio automático. Este motor siempre va asociado a la tracción delantera. En segundo lugar, puede montar un 2.0 TFSI de 252 caballos, asociado siempre al cambio S Tronic. Acelera de 0 a 100 km/h en 6’7 segundos y declara un consumo medio de 5’9 litros. Con l atracción Quattro, alcanza los 100 km/h en 6’5 segundos y el consumo medio asciende a 6’7 litros.
La oferta diésel es más amplia. Empieza con un 2.0 TDI con 150 y 190 caballos, equipados con una tecnología que Audi denomina Ultra y que consigue optimizar los consumos. El de 150 caballos acelera de 0 a 100 km/h en 9’5 segundos y obtiene un consumo mixto de 4’4 litros. El motor de 190 caballos con cambio S Tronic alcanza los 100 km/h en 8’2 segundos y homologa un consumo mixto de 4’2 litros.
Por lado, hay tres versiones 3.0 TDI, con 218, 272 y 320 caballos. El menos potente, asociado al cambio S Tronic y tracción Quattro, acelera de 0 a 100 km/h en 6’6 segundos y declara un consumo de 5’3 litros. El de 272 caballos acelera de 0 a 100 km/h en 5’5 segundos y homologa un consumo en ciclo combinado de 5’1 litros. Por último, el más potente de 320 caballos va asociado al cambio Tiptronic y tracción Quattro. Tarda solo 5 segundos en alcanzar los 100 km/h y consume una media de 6 litros.