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Una calidad superior
El aspecto exterior se mantiene una vez se entra al interior del Giulia, con unos materiales de primera incluso desde los modelos más modestos dentro de la gama. Se nota que tiene un estilo particular, muy elegante y bien conseguido – aunque no tiene el mismo nivel de calidad que rivales como Audi. Destaca la forma del cuadro de mandos, estilo binocular pero con formas más posmodernas alrededor del velocímetro y del cuentarrevoluciones.
El sistema de infoentretenimiento y multimedia aparece a través de una gran pantalla táctil situada en la parte superior de la consola central, ocupando todo el ancho posible a la misma altura del cuadro de mandos. Su uso es bastante lógico lo que facilita el acceso a todas las posibilidades que ofrece el coche, entre ellas la conectividad con teléfonos móviles, un elemento que se hace presente en casi todos los coches del mercado actual.
En términos de espacio no destaca de manera especial, ni por ser muy espacioso ni por no serlo – tiene, en definitiva, el espacio que le corresponde a una berlina media con 4,6 metros de longitud. Lo que sí tiene son unos asientos con una forma que parecen parte de una colección de moda de alta costura, además de ser capaces de sujetar bien a quienes van sentados en ellos.
El Giulia cuenta con 480 litros cúbicos, una cifra que varios rivales mejoran debido al estilo con el que se ha diseñado este sedán italiano. El Honda Civic sedán tiene 519 litros, el Volkswagen Jetta 510 litros y el Skoda Octavia 590 litros. Eso sí, el BMW Serie 3 también tiene 480 litros como el Giulia, superando ambos al Mercedes-Benz CLA (470 litros), al Volvo S60 (380 litros), al Opel Astra Sedan (460 litros), al Jaguar XE (455 litros) o al Audi A5 (465 litros).