Un gran descapotable
El Opel Cabrio es un coche interesante dentro de todo lo que se puede encontrar en los concesionarios de Opel, siendo un descapotable bastante amplio sin llegar a ser un deportivo descapotable como otros casos que se pueden encontrar en el mercado actual. El Cabrio, que llegó por primera vez en los mercados en 2013, se enfrenta a otros vehículos descapotables en el mercado como pueden ser el Audi A5 Cabrio, el BMW Serie 3 Cabrio o el Mercedes-Benz Clase E Cabrio, entre otros.
La historia del Opel Cabrio es breve, pero bastante curiosa: en el resto de Europa se le conoce como Opel Cascada, pero a la hora de llegar al mercado español decidieron (por motivos no muy difíciles de adivinar) que ese nombre no era el más idóneo para los compradores y optaron por el nombre de Cabrio. Por tanto, se une a una lista de vehículos que en el mercado español se han visto forzados a cambiar de identidad gracias a la riqueza de nuestros campos léxicos y semánticos.
Al contrario de lo que podría llegarse a pensar en un principio, no se trata de una simple reconversión del Insignia a descapotable, aunque las similitudes entre ambos son evidentes. Ambos tienen el frontal característico de los Opel actuales, aunque en el caso del Cabrio son menos afilados y más redondeados tanto en los faros como en la parrilla – se debe, entre otras cosas, a que otros modelos han sido actualizados mientras que el Cabrio se ha mantenido en su estado actual desde 2013.
En cierto modo este modelo toma una apariencia similar a la que tuvo en su momento el Astra Bertone, una variante descapotable, más larga y también de cuatro plazas del Astra G que se comercializó a principios del nuevo milenio. El espíritu en cierto modelo se asemeja – sobre todo porque no se basa en el Insignia, sino en el Astra actual – aunque este coche tiene un espacio en el mercado bastante mayor ya que está mucho más avanzado a nivel de mecánica y de tecnología.