Muchas opciones por delante
Siendo el coche deportivo de una de las marcas más lujosas del mundo, el Continental GT ya tenía de por sí un manejo bastante superior al resto de modelos (por ello se ha utilizado como base para coche de carreras). En esta tercera generación lleva un sistema de tracción total inteligente que, en vez de mantener la distribución de potencia en una relación 40/60 (de manera que la mayor parte va al eje trasero) lo va redirigiendo según las condiciones en las que se conduzca.
El manejo se ve mejorado gracias al uso de la plataforma MSB desarrollada en conjunto con Porsche, fabricada en buena parte con aluminio. El nuevo Continental GT cuenta con un chasis adaptativo con el sistema Dynamic Ride, capaz de controlar de manera electrónica el balanceo de la carrocería para mejorar el paso por curva. Es 80 kilogramos más ligero que su antecesor, lo que hace que sea más dinámico.
Como ocurre con otros modelos de la marca, el Continental GT cuenta con varios modos de conducción de manera que se puede configurar para que se circule con una marcha más cómoda o para aprovechar las bondades del chasis y tomar curvas a mayor velocidad con el llamado modo Sport. En definitiva, es mucho más dinámico que el resto de coches de Bentley en el mercado.
Lo más interesante del Continental GT no es lo que tiene bajo el capó a la hora de su lanzamiento, sino lo que tendrá en los años siguientes ya que se han anunciado que llegarán diversos motores. De entrada llega con su monstruoso W12 TSI que también tiene el Flying Spur o el Mulsanne, pero para el futuro llegará un V8 turbo que podrá servir como modelo de acceso. Además, Bentley introducirá una variante V6 híbrida con la misma mecánica que el Porsche Panamera.
El único motor que lleva el Continental GT en su estreno es el W12 6.0 TSI, un motor con unas prestaciones brutales que representa lo mejor de la ingeniería del Grupo Volkswagen. Este propulsor genera 635 caballos de potencia y hasta 900 Nm de par motor. La única caja de cambios disponible es una automática de ocho velocidades y de entrada es tracción total.
Su aceleración de 0 a 100 es de apenas 3,7 segundos y es capaz de alcanzar los 333 kilómetros por hora – eso sí, con respecto a la versión anterior, este motor es capaz de emitir un 16% menos de emisiones de CO2, con una cifra homologada de 278 gramos por kilómetro. En términos de consumo medio, su cifra oficial es de 12,2 a los 100 en ciclo mixto.