Un espacio utilizado con inteligencia
Peugeot ha dado avances en este aspecto, consiguiendo mayor espacio para sus ocupantes en el habitáculo que en el 207 anterior pese a ser un coche más corto. Lo que destaca sobre todo es el i-Cockpit, compuesto por un volante puesto en una posición baja, que se coloca por debajo de un cuadro de mandos que sobresale para poder mirar a la carretera al mismo tiempo que se conduce – otro aspecto a tratar son los materiales, de mucha mejor calidad que en su antecesor.
En la consola central, el 208 trae una pantalla táctil (de serie en todos los modelos salvo los niveles de entrada) que resulta fácil de utilizar debido a la forma en la que se ha posicionado, según el medio británico Top Gear. En general tiene un interior que desprende calidad y un diseño contemporáneo, siguiendo el estilo de los coches del Grupo PSA aunque sin centrarse en deslumbrar con el diseño como ocurre con los modelos de Citroën, más pensados para los fines de semana.
El facelift realizado en 2015 mantiene las mismas dimensiones del actual Peugeot 208: 3,962 metros de largo, 1,739 de ancho y 1,460 de alto. Estas medidas son similares a las del Volkswagen Polo, el Toyota Yaris, el Ford Fiesta o el Audi A1 y, aunque el A1 es más ancho, el 208 cuenta con una altura mayor para poder alojar mejor a la fila trasera de pasajeros al mismo tiempo que hay espacio suficiente para los hombros.
El 208 cuenta con 285 litros cúbicos de espacio en su maletero, manteniéndose en las mismas cifras que el DS 3, el Opel Corsa, el Yaris, el Fiesta o el Polo a la vez que supera por 15 litros al A1 y al Ford Ka+. Se sitúa en la zona media en este apartado dentro de los coches compactos, pues hay coches con mucho menos maletero y otros como el Honda Jazz, el nuevo Seat Ibiza o el Suzuki Baleno, que superan los 350 litros cúbicos.