Más tecnológico y habitable
Aunque el diseño exterior ha cambiado muy poco, interior del nuevo Renault Clio no tiene nada que ver con el de la generación saliente. En líneas generales, es un habitáculo que transmite mucha más sensación de calidad y amplitud. Esto lo consigue con un nuevo salpicadero con un diseño muy horizontal, enfatizado por unas rejillas que prolongan las bocas de aire del climatizador. En el centro, de se ubica la nueva pantalla táctil del sistema multimedia, de 7 o 9,3 pulgadas, según el acabado.
Como viene ocurriendo en los últimos productos de Renault, la pantalla está colocada en posición vertical, lo cual, permite una mejor distribución de los diferentes contenidos. La pantalla engloba la mayoría de funciones del coche, aunque la marca francesa ha dejado a parte la gestión del climatizador, mediante unos comandos físicos en forma de ruleta que facilitan su manejo. También ha colocado algunos botones en forma de pequeñas teclas en la base de la pantalla para las funciones principales. Son los únicos botones físicos que encontramos en el habitáculo.
Por otro lado, es destacable la disposición de la consola central, sobre elevada, con un gran pomo del cambio, una superficie para la carga del móvil y varias tomas USB y auxiliares. Las versiones más básicas, cuentan con un cuadro de instrumentos analógico clásico. Las más equipadas incluyen uno digital, con una pantalla de 7 pulgadas, configurable en varios formatos. Más adelante, se podrá elegir una pantalla de 10 pulgadas opcionalmente.
El habitáculo cuenta con numerosos huecos para depositar objetos, tanto en las puertas como en la consola central, el apoyabrazos delantero, el túnel central y la guantera. La sensación de calidad que se percibe, al acceder al interior, es bastante alta, en comparación con el anterior modelo. Hay superficies un poco blandas, concretamente, la parte superior del salpicadero y de las puertas. También la moldura que recorre el salpicadero puede tener un ligero mullido en las versiones más equipadas. El acabado RS Line incluye un plástico que imita la fibra de carbono. El resto de plásticos son duros, pero, en general, transmiten buena calidad y un buen nivel de ajuste.
Aunque el nuevo Renault Clio es unos milímetros más pequeño que el anterior modelo, el espacio interior se ha mejorado mucho para aumentar la habitabilidad. Las plazas delanteras son muy espaciosas y solamente la consola central puede restar algo de espacio a las piernas. Detrás se viaja muy cómodo, el acceso no es muy fácil, porque las personas altas pueden golpear la cabeza con el techo, pero, una vez dentro, hay altura suficiente para la cabeza. También para las piernas, gracias al nuevo diseño de los asientos delanteros. En las plazas posteriores falta algún de acceso USB.
En este punto, el utilitario francés ha mejorado de forma exponencial. La capacidad del maletero es de 340 litros, incluyendo el doble fondo. Esta cifra lo coloca entre los mejores de su categoría, incluso, al mismo nivel que modelos de segmento superior. Además, cuenta con formas muy cúbicas que lo hacen más aprovechable. El único defecto es que el umbral queda muy alto.