MINI CLUBMAN: Opiniones y precios

Filosofía Mini en formato familiar

En Carnovo:
  • IVA incluido
  • Servicio en concesionarios oficiales
  • Impuesto de circulación incluido
  • Garantía incluida a nivel nacional
  • Incluye matriculación

Opinión de MINI CLUBMAN

  • Diseño original
  • Nuevas puertas laterales
  • Buen equipamiento de serie
  • Maletero
  • Visibilidad trasera
  • Puertas del maletero poco prácticas
  • PVP 26.200€

Dentro del segmento C de los coches compactos, existe una especia de subcategoría, la de los compactos de tipo premium, en donde se ubican modelos como el Audi A3 o el Mercedes Clase A, entre otros, que ofrecen la calidad de grandes marcas pero en formato más contenido. La apuesta de Mini para rivalizar en esa lucha encarnizada es el Mini Clubman, un coche que ofrece todas las singularidades de un modelo de la arca convencional pero, añadiendo un mayor espacio para viajar más cómodo en familia.

Todos conocemos la marca Mini por el legendario utilitario de los años sesenta y que luego BMW se encargó de renacer en una versión más adaptada al Siglo XXI. Ese renacimiento del popular utilitario británico le ha deparado a la marca alemana un gran número de ventas y es uno de los coches más apreciados por muchos conductores, en especial, jóvenes. Pero, precisamente, por ser un coche de dimensiones muy reducidas, huye del interés de un perfil de clientes al que le gusta pero que, por necesidad de mayor habitabilidad y comodidad, acaba decantándose por, o bien otros modelos de BMW, como un Serie 1, o directamente mira en otros fabricantes.

La marca alemana encontró la solución a este problema con el Mini Clubman, un coche que eliminaba los problemas de espacio del Mini normal. Sin embargo, la anterior generación no terminó de cuajar entre el público por un diseño un tanto forzado, con la presencia de una puerta lateral que se deslizaba para acceder a las plazas traseras que no era muy práctica. La segunda generación del Clubman, con 4’25 metros de longitud, introduce cuatro puertas laterales convencionales, lo cual, ayuda al acceso a las plazas traseras, aunque mantiene la doble puerta para abrir el maletero, como un guiño al clásico Clubman, si bien, este recurso sigue siendo poco práctico, al dificultar la maniobra de carga y descarga en situaciones específicas, por ejemplo, cuando dejamos el coche pegado a una pared o a otro coche.

Por lo demás, el diseño del Mini Clubman se parece muy al de un Mini de tres puertas, conservando las mismas ópticas delanteras, la parrilla y una estética bastante horizontal que le da una gran sensación de aplomo. Si lo miramos de perfil, comprobamos la baja altura del techo y el escaso tamaño de las ventanillas, un detalle que impide la entrada de luz en el interior. Los pilotos traseros han crecido considerablemente, respecto a la generación anterior y ahora se colocan en posición horizontal.

Está construido sobre la misma plataforma UKL2 del BMW Serie 2 Active Tourer, algo que habla muy claro de las intenciones del fabricante alemán para hacer un vehículo verdaderamente espacioso. Si hablamos de motores, el Mini Clubman emplea la misma gama que ya utiliza la marca en otros modelos. Ofrece tres mecánicas de gasolina, entre 102 y 192 caballos y otras tres diésel, entre 116 y 190 caballos. La tracción puede ser al eje anterior o a las cuatro ruedas, según versiones, mediante el sistema All4 y la transmisión puede ser manual de seis velocidad, o automática de seis u ocho relaciones.