El Clase V es lo que promete ser desde el primer momento: una furgoneta en la que se puede disfrutar de todo el confort y toda la tecnología que utiliza Mercedes-Benz a la hora de fabricar sus turismos. En este sentido estaba claro que no iba a defraudar, además de continuar el camino que comenzó en 1996 y continuó después como Viano, antes de recuperar su nombre actual.
Como suele ocurrir en muchos modelos de la casa germana, el precio juega en su contra – sobre todo en el caso del tope de gama Exclusive, más del doble del precio básico – además de no ser un vehículo con una gran potencia. Ahora bien, siendo una furgoneta espaciosa, con detalles bonitos y que en términos de seguridad no repara gastos, poco más se puede pedir.