IVA incluido Servicio en concesionarios oficiales Impuesto de circulación incluido Garantía incluida a nivel nacional Incluye matriculación
Repertorio ‘Made in PSA’
El DS 4 Crossback tiene desde un principio la premisa de ser cómodo para conducir y para circular, beneficiándose con respecto al DS 4 (así como del Citroën C4, que es el coche en el que se basa) de una posición de conducción más alta. Esto hace que la visión se vea mejorada y ampliada hacia delante – eso sí, por la forma en la que se ha diseñado la carrocería no tiene tanta visión hacia atrás.
La suspensión es la misma que utiliza el C4 pero con un recorrido más largo: es un sistema más bien simple en lugar de sistemas multibrazo que utilizan otros coches del segmento Premium en la actualidad. A cambio de ser más alto, DS ha endurecido la suspensión lo justo para que no haya más balanceo de la carrocería al mismo tiempo que consigue absorber con efectividad los baches que pueda haber en la carretera. La parte trasera también es bastante estable.
La dirección de asistencia electrohidráulica es bastante cómoda, sobre todo para circular por zonas urbanas gracias a que tiene un buen radio de giro. En lo que a la calidad de rodadura tampoco pierde nivel ya que tiene muy poco ruido ni del propio roce de las ruedas ni del viento.
Los motores con los que cuenta el DS 4 Crossback son los mismos que se pueden encontrar en otros modelos del Grupo PSA, por lo que en este sentido no hay ninguna innovación por parte de la marca: los motores gasolina son los PureTech y THP mientras que la familia de motores BlueHDi conforman el lado de los diesel. En total el DS 4 Crossback tiene dos propulsores de cada tipo.
El primero de ellos es el PureTech 1.2 tricilíndrico turbo, el mismo que tantas alegrías y reconocimientos le ha dado al grupo francés por su buen rendimiento en otros coches como el Peugeot 208 – en el DS 4 Crossback este motor genera 130 caballos, además de tener un consumo medio de 6 litros a los 100. Por otro lado, el THP 1.6 cuenta con 165 caballos, un consumo de 7,1 litros a los 100 y tiene disponible cambio automático en lugar del manual que equipa el PureTech.
Los dos motores pertenecen a la familia BlueHDi, siendo el primero de ellos un 1.6 con 120 caballos – llama la atención el hecho de que puede equiparse tanto con cambio manual como con el cambio automático (sus cifras de consumo son de 4,3 o 4,6 litros a los cien, variando en función del cambio que se escoja). El otro motor es un 2.0 de 180 caballos con cambio automático, siendo el motor más potente que tiene el coche en su repertorio.