Más grande y muy tecnológico
El interior del Mercedes-Benz Clase A 2018 es uno de los aspectos que más ha cambiado, con respecto a la generación anterior. El coche ha crecido en 12 centímetros, aunque la distancia entre ejes solo ha aumentado 3 centímetros, hasta los 2’73 metros. Esto proporciona al turismo compacto alemán una mayor habitabilidad.
Lo primero que se percibe al sentarse en el nuevo Clase A es una mayor calidad de acabados, no solo visual sino también al tacto. La mayoría de materiales son blandos y los plásticos más duros son muy agradables. El diseño del salpicadero está inspirado en los modelos más grandes de la marca, el Clase E y Clase S, con gran protagonismo de los tres aireadores centrales.
De serie el Mercedes-Benz Clase A 2018 viene equipado con dos pantallas de 7 pulgadas cada una. Opcionalmente, estas pantallas pueden ser de 10’25 pulgadas, la primera para el cuadro de instrumentos, que se puede configurar en varios formatos, y la segunda para el sistema de información y entretenimiento. Lo que distingue al compacto alemán de sus hermanos mayores es que ambas pantallas prescinden de visera y parecen flotar sobre el salpicadero.
El volante también es de nuevo cuño. Tiene tres radios y diversos comandos para gestionar el navegador, el audio y las diferentes funciones de conducción. El nivel de ajustes es altísimo, como en el resto de piezas del habitáculo. en la consola central, entre los asientos delanteros, hay una superficie en negro brillante con un mando táctil desde el que se puede gestionar el contenido del sistema multimedia MBUX.
El sistema MBUX es nuevo en Mercedes-Benz y lo estrena el Clase A. Contiene una nueva interface, mejores gráficos, menús mejor organizados y un avanzado control por voz que se activa desde el volante o diciendo “Hola Mercedes”, parecido a los sistemas Siri de Apple y Alexa de Amazon. Otro punto interesante del sistema MBUX es que tiene una inteligencia artificial que analiza los gustos y hábitos del conductor y puede recomendarle sitios donde ir, una emisora de radio o un tipo de música.
Al ser más grande, el espacio para los pasajeros es mayor que en el Clase A anterior. No obstante, sigue sin ser un coche cómodo para cinco pasajeros. Delante, el espacio es holgado. Detrás, la plaza central es pequeña, aunque en general, el coche ha aumentado sus cotas en anchura y distancia para las piernas.
El maletero del Mercedes-Benz Clase A 2018 ha ganado 29 litros respecto al modelo precedente, por tanto, es más aprovechable. Otro aspecto positivo es que la boca de carga también es más generosa, lo que facilita la maniobra de carga y descarga de bultos. Está equipado con ganchos y argollas y, bajo el piso, tenemos un kit de emergencia para pinchazos, pero no hay una rueda de repuesto.