Cuatro niveles de acabado diferentes
Desde que salió al mercado en 2014 – el modelo de 2017 es más un restyling que una nueva generación – el Kia Soul ha contado con una valoración de 4 estrellas Euro NCAP de 5 posibles. Esta puntuación se debe a que no logra destacar en ningún área en concreto mientras que en algunas está algo por debajo de la media en comparación con sus rivales. Esta observación también se puede hacer en el Soul EV, que también cuenta con 4 estrellas.
En la categoría de protección a pasajeros adultos el Soul logra un 75% (el Soul EV llega al 85%), habiendo rivales como el Volkswagen Golf Sportsvan que llegan al 87%, el Volkswagen Caddy con un 84% o el Renault Scénic con un 90%. En la categoría de protección a pasajeros infantiles el Soul consigue su mejor puntuación con un 82%, la misma del Scénic pero inferior a otros monovolúmenes como el Fiat 500X (85%) o el Golf Sportsvan con un 85%.
En la categoría de protección a peatones el Soul logra llegar al 59%, mientras que en equipamiento de serie – una categoría cada vez más importante por los avances tecnológicos que se están desarrollando en la actualidad – el Soul se queda en un 56%. Entre los sistemas de seguridad que destaca la marca están la gestión de estabilidad del vehículo o el asistente de luces en carretera.
El Soul se diferencia un poco de otros modelos de Kia en sus niveles de acabado, puesto que no son iguales que en el resto de la gama: los niveles son Concept, Drive, Emotion y Sport, siendo este último el tope de gama. El EV se vende además como modelo aparte.
El primer nivel de acabado cuenta con los motores más básicos, pero que son en definitiva los que más ventas deberían traerle a Kia por las características propias del Soul. De entrada viene con cámara trasera de ayuda a estacionamiento, ordenador de viaje, aire acondicionado y encendido automático de luces.
Otros elementos del Concept están también presentes en el nivel de acabado Drive como son la conexión Bluetooth – para emparejar el coche con diferentes dispositivos móviles – y llantas de aleación. Eso sí, los motores continúan siendo los más básicos, los mismos que ya tenía en 2014.
A medida que se va subiendo en los niveles de acabado, también van apareciendo opciones nuevas. El Soul puede llevar faros de xenón delante, climatizador automático en lugar de aire acondicionado, acceso y arranque sin llave, techo solar panorámico y un equipo de sonido Infiniti.
En el último nivel de acabado es en el que se ofrece el motor tope de gama, el 1.6 T-GDI con sus 204 caballos – mostrando la faceta deportiva de Kia, cada vez asomándose con más fuerza. Además de tener retoques deportivos por todos lados, la pantalla táctil pasa de tener 5 a 7 pulgadas.