IVA incluido Servicio en concesionarios oficiales Impuesto de circulación incluido Garantía incluida a nivel nacional Incluye matriculación
Atmósfera premium
Con el último restyling, el Jeep Grand Cherokee ha mejorado ligeramente el aspecto del interior, que acentúa aún más el carácter premium de este gran todoterreno. Sin embargo, a nivel de acabados está por debajo de algunos de sus competidores, como los alemanes o el Land Rover Discovery, aunque todos estos han sido renovados recientemente, sobre todo, el Discovery, y el Grand Cherokee supone una actualización del modelo de 2011.
Una vez sentado en el puesto de mandos, la posición es claramente elevada y permite un dominio absoluto de la carretera. En el centro del salpicadero destaca la nueva pantalla de 8’4 pulgadas del sistema Uconnect, que incluye navegador y permite controlar diversas funciones del coche, así como varias opciones de conectividad con el móvil. La pantalla está flanqueada por las tomas de ventilación verticales y debajo se encuentran los comandos del climatizador y radio. En la consola central entre los asientos, hay algunos botones para gestionar algunos parámetros del coche, como la reductora o el control de tracción.
Los asientos son cómodos y pueden tener hasta ocho posiciones diferentes con memoria, por lo que será fácil encontrar la posición ideal de conducción para cada usuario. En el habitáculo hay elementos de calidad, como molduras en madera, tapicería de piel y superficies blandas agradables a la vista y al tacto.
Las plazas delanteras disponen de un espacio holgado en el que dos adultos altos pueden viajar cómodamente. En la fila posterior, el espacio para las piernas es muy bueno, pero no destaca por la anchura. Otras alternativas del segmento ofrecen unas plazas traseras más generosas.
Sin duda, el punto más débil de este vehículo es su maletero. Tiene una capacidad de 457 litros, una cifra muy pobre para un todoterreno de 4’82 metros de largo. Incluso en segmentos inferiores, hay SUV que ofrecen un volumen mucho mayor.