Un SUV híbrido también puede ser dinámico
Tres años después de su lanzamiento, el Toyota C-HR se renueva para seguir siendo una de las referencias en el competitivo segmento de los crossovers compactos. Mide 4,36 metros de largo y tiene como principal alternativa al Kia Niro, aunque también se puede comparar con la versión híbrida del Hyundai Kona.
Estéticamente, los cambios son sutiles, como suele ocurrir en un restyling. El nuevo SUV de Toyota mantiene el diseño llamativo que tanto éxito ha tenido, aunque presenta un frontal rediseñado, con ligeros cambios en los faros completamente LED, con nueva firma lumínica. La vista lateral mantiene el efecto de techo flotante y el tirador de las puertas traseras incrustados en el pilar C y la zaga luce ahora nuevos pilotos LED unidos por un alerón negro brillante, que le da un aspecto más deportivo.
En el interior del Toyota C-HR 2020, el diseño no varía, aunque se han mejorado los materiales que revisten algunas zonas. Destaca la presencia de la pantalla táctil sobre el salpicadero, en una posición correcta para su visualización. Las principales novedades en el habitáculo están en el nuevo sistema multimedia, que ahora es compatible con Apple CarPlay y Android Auto. Se mantienen las cotas de habitabilidad, pero el maletero se reduce en la versión más potente.
En cuanto a motores, el SUV híbrido de Toyota presenta una novedad, un nuevo sistema híbrido que entrega 184 caballos unido a una batería de hidruro de níquel. Esta mecánica se suma a la ya existente de 122 caballos que, ahora, estrena una batería de iones de litio. El nuevo motor se combina con una nueva caja de cambios transaxle que sustituye a la de variador continuo, que se mantiene en la versión menos potente.