Paso a paso, generación a generación, el Citroën C4 Picasso va mejorando en los pocos aspectos que le quedan por pulir y sigue manteniendo las cualidades que le han convertido en un superventas desde su aparición. Es un monovolumen más ligero, con una clara y evidente apuesta por la tecnología que no encuentra rival en su segmento. También es más seguro y su nueva hornada de propulsores ayudan a que los consumos sean todavía más contenidos. Al mismo tiempo, el C4 Picasso sigue brillando por su excelente funcionalidad y por la atención que presta a todos aquellos detalles que contribuyen de manera significativa a que un vehículo como este sea imbatible como compañero de viajes.