Aunque sea un coupé, el A5 no es un coche pensado para conducir con un estilo deportivo (para eso existe el S5), aunque tampoco se especializa en el confort absoluto. A partir de una base tan sólida como es el A4 se ha obtenido un coche que resulta el paso medio en el mercado hasta llegar al A6, que ya se acerca al segmento de vehículos de lujo.
No transmite las sensaciones de otros modelos de gran tamaño del mercado, pero pocos vehículos consiguen moverse con elegancia o soltura por carretera. Cuenta con un gran nivel de tecnología en su interior, justificando un precio que ronda los 48.000 euros según la versión que se escoja.