Un coupé divertido y fácil de conducir
El diseño exterior del BMW 2 ha cambiado sutilmente, como es habitual en este tipo de restyling. Conserva la clásica doble parrilla, en forma de riñones, ahora más grande y la forma de los grupos ópticos, aunque modifica la arquitectura interna de éstos, con un fondo negro y una nueva firma luminosa LED. Los faros pueden ser ahora Bi-LED y adaptativos. Los paragolpes también son nuevos, con un aspecto más deportivo. El capó sigue siendo muy grande, alargado y con varias nervaduras que le imprimen dinamismo.
El resto del coche se mantiene igual, con la característica caída del pilar B hacia la zaga que le da esa elegante y deportiva línea coupé, propia de los BMW. En la zaga también encontramos algunos cambios ligeros, como en la arquitectura de los pilotos, con efecto tridimensional y luces LED. Se han añadido tres nuevos colores para la carrocería: dos tonos de azules, Mediterranean Blue y Seaside Blue, y un naranja metalizado Sunset Orange.
El interior del BMW 2 también ha recibido algunas mejoras que afectan, sobre todo, a la calidad de los materiales y al equipamiento tecnológico. Puede equipar una pantalla de hasta 8’8 pulgadas, táctil y a color, con una nueva interfaz para el equipo multimedia que puede incorporar también el navegador Professional. También incluye el mando iDrive con una superficie táctil para manejar el navegador.
La gama de motores de este deportivo permanece inalterada. Incluye mecánicas diésel y de gasolina, de 3, 4 y 6 cilindros, con potencias entre 136 y 340 caballos. Algunas versiones pueden tener tracción total xDrive. El Serie 2 Coupe ofrece un comportamiento en carretera muy dinámico, con un chasis muy bien elaborado en el que destacan las suspensiones firmes, pero con buena capacidad para filtrar los baches.