Pocas opciones donde elegir
Nos encontramos ante uno de esos coches con los que se puede viajar muy a gusto con toda la familia. En autovía es un coche muy confortable porque tiene unas suspensiones blandas que filtran de maravilla cualquier bache de la carretera. Sin embargo, en carreteras de curvas se muestra poco ágil, tarda en encontrar los apoyos en curva y los balanceos de la carrocería se notan bastante. Es un vehículo pensado para circular de forma tranquila y relajada.
La dirección no es muy informativa, pero es precisa y guía bien al X-Trail. El motor diésel de 130 caballos es suficiente para mover con soltura al SUV japonés. No es rápido y se muestra algo perezoso a bajas vueltas, hasta las 1.800-2.000 revoluciones, pero, a cambio, destaca por un consumo bajo. El motor de 177 caballos tiene una aceleración más contundente pero, en circunstancias generales, no se percibe la mayor diferencia de potencia.
Sin ser un auténtico todoterreno, el nuevo Nissan X Trail muestra buenas capacidades para circular fuera del asfalto. Para ello, cuenta con una altura al suelo de 21 centímetros que le permite unos buenos ángulos de ataque y de salida. También dispone del sistema de tracción All Mode 4x4-i. Este sistema permite configurar la tracción en tres programas: 2WD, al eje anterior; 4WD Auto, a las cuatro ruedas con reparto de par automático; y 4WD Lock, a las cuatro ruedas de modo permanente, gracias al bloqueo del diferencial central. Aquí, las suspensiones blandas adquieren un papel importante, ya que permite que el X-Trail se comporte mejor en terrenos Off Road, al contar con recorridos más largos de las ruedas que permiten mejores apoyos en la superficie.
No puede decirse que la gama de motores del X-Trail sea extensa. Cuenta con solo tres opciones, una de gasolina y dos diésel, aunque el rango de potencias es suficiente para un coche de su tamaño y peso, desde los 130 hasta los 177 caballos. La tracción puede ser delantera o a las cuatro ruedas y se puede combinar con un cambio manual de seis relaciones o automático X-Tronic de variador continuo.
En este caso, solo tiene un 1.6 DIG-T que desarrolla 163 caballos. Este motor siempre va asociado al cambio manual y tracción delantera. Acelera de 0 a 100 km/h en 9’7 segundos y declara un consumo medio de 6’2 litros.
El primer motor diésel es un 1.6 DCI, de origen Renault, con 130 caballos. Con cambio manual y tracción delantera, acelera de 0 a 100 km/h en 10’5 segundos y homologa un consumo de 4’9 litros y pasar a 11 segundos y 5’3 litros con la tracción total. En segundo lugar, está el 2.0 DCI de 177 caballos, asociado a un cambio automático y tracción total, alcanza los 100 km/h en 10 segundos y gasta una media de 6 litros.