El Tesla Model X no vuelca

La seguridad al volante es uno de los aspectos que más valoran los usuarios a la hora de comprar un vehículo nuevo. Por eso, los fabricantes de coches ponen toda la carne en el asador para que sus automóviles sean lo más seguros posibles. Y otros, como la marca norteamericana Tesla, lo demuestran. Eso es…

El Tesla Model X no vuelca

La seguridad al volante es uno de los aspectos que más valoran los usuarios a la hora de comprar un vehículo nuevo. Por eso, los fabricantes de coches ponen toda la carne en el asador para que sus automóviles sean lo más seguros posibles. Y otros, como la marca norteamericana Tesla, lo demuestran. Eso es lo que ha pasado en las últimas horas, pues el fabricante yanqui ha demostrado que el Tesla Model X no vuelca. O al menos le cuesta horrores.

Publicado en vídeo

Para demostrar que el Tesla Model X no vuelca a la primera de cambio, la firma que comanda Elon Musk ha publicado un vídeo en el que se ve al SUV Tesla desplazado lateralmente a gran velocidad encima de una plataforma. Entonces, la plataforma colisiona bruscamente con un montante a una altura diferente por la parte lateral baja del Tesla crossover, intentando hacer que éste vuelque.

A pesar de la violencia del impacto y de ser una mezcla entre SUV y monovolumen, el Tesla Model X no sucumbe a las inercias y consigue mantenerse “en pie”. Después, eso sí, de ver cómo el otro lateral del vehículo se eleva hasta formar un ángulo de aproximadamente unos 45º con respecto al suelo. Puedes verlo en la imagen que está justo debajo de estas líneas.

El Tesla Model X no vuelca

La clave es el centro de gravedad

El Tesla Model X es un coche cuyo peso ronda las dos toneladas y media, algo tan solo al alcance de unos pocos. Este dato, unido a la altura propia de un vehículo de sus características (tiene una altura de 1,68 m), hace que la estabilidad se vea reducida. Pero Tesla se ha encargado de que el Model X, como el resto de sus modelos, no es un automóvil al que se pueda catalogar como normal.

El centro de gravedad del vehículo es bastante bajo gracias a unas baterías instaladas justo por debajo de los asientos. Estas baterías tienen un peso de 500 kg y, más allá de proporcionar energía a sus potentes motorizaciones 100% eléctricas, cumplen una función de seguridad: hacen que el desplazamiento lateral del Tesla Model X en curva sea mínimo y, por tanto, su seguridad sea mayor.

Prueba realizada por la NHTSA

El organismo encargado de realizar estas pruebas al Tesla Model X ha sido la NHTSA, o National Highway Traffic and Safety Association, que viene a ser el equivalente americano de EuroNCAP. Sin embargo, a pesar de los vídeos e imágenes publicados, Tesla no ha querido divulgar más datos con respecto a las pruebas realizadas, como la velocidad a la que se desplaza lateralmente el vehículo. Aun así, sí que sabemos que se trata de pruebas internas para que sus modelos evolucionen a mejor.

Trasera del Tesla Model X