Es evidente que la conducción es una actividad que requiere de toda la atención y concentración por parte del conductor. En la conducción, intervienen muchos elementos que ponen en juego nuestra seguridad y también la de los demás usuarios de la carretera. Por eso, el reglamento de la Dirección General de Tráfico se preocupa mucho…
Es evidente que la conducción es una actividad que requiere de toda la atención y concentración por parte del conductor. En la conducción, intervienen muchos elementos que ponen en juego nuestra seguridad y también la de los demás usuarios de la carretera. Por eso, el reglamento de la Dirección General de Tráfico se preocupa mucho de velar por la seguridad de todos y prohíbe aquellos hábitos que puedan suponer un riesgo.
Uno de esos hábitos, muy extendidos en muchos conductores, es el de fumar conduciendo. Muchos piensan que está permitido y es verdad que no existe ninguna prohibición al respecto. Sin embargo, fumar conduciendo sí puede ser una conducta sancionable. En este artículo te explicamos detenidamente si se puede fumar conduciendo.
Fumar conduciendo: ¿está permitido?
Para responder a esta pregunta, tenemos que dirigirnos a lo que dice el código de circulación. En este sentido, no existe ningún artículo que prohíba expresamente fumar conduciendo como, por ejemplo, sí ocurre, con otras acciones como coger el teléfono móvil, que sí está sancionado. Sin embargo, el mismo código de circulación recoge la obligación por parte del conductor de “mantener su propia libertad de movimientos, el campo necesario de visión y la atención permanente a la conducción”. Por tanto, lo que dice el código de circulación es no poner el foco en el hecho en sí de fumar, sino en la distracción al volante que pueda implicar.
No solamente fumar es una actividad que puede provocar una distracción al volante. También lo son otras como beber, maquillarse o comer. Todas estas y otras no están prohibidas taxativamente en el reglamento, pero son sancionables si se consideran que pueden ser motivos de distracción.
¿Qué dice la DGT?
Dejamos claro que fumar conduciendo no es una infracción grave. Pero un conductor puede ser multado por fumar mientras conduce, aunque la multa no sería por fumar, sino por la pérdida de atención o concentración que pueda implicar el hecho de fumar. Se trata de una cuestión un poco subjetiva, tanto que es la Guardia Civil o la policía correspondiente la encargada de dictaminar qué puede ser o no considerado como una falta de concentración al volante.
¿Cuál es la sanción?
Normalmente, la multa por fumar conduciendo será de 100 euros, aunque habrá que tener en cuenta el contexto en que se produzca. De todas formas, hay que insistir en que la multa dependerá de otros factores, como si además se supera el límite de velocidad, por ejemplo.
¿Por qué es desaconsejable fumar conduciendo?
Lo cierto es que fumar conduciendo es totalmente desaconsejable porque eleva el riesgo de sufrir un accidente. En primer lugar, porque el hecho de encender un cigarrillo o de fumarlo conlleva distracciones. Por otro lado, existe el riesgo de quemarse con el cigarrillo y dar un volantazo brusco. Al quemarse, es habitual retirar la mano con brusquedad, lo que puede ocasionar un giro violento del volante de forma involuntaria, con consecuencias fatales, tanto para el conductor que fuma como para los demás ocupantes de la vía.