Hoy en día el mercado está plagado de SUV, coches con una apariencia de todoterreno pero que rara vez cuentan con las aptitudes offroad necesarias para circular con garantías fuera de la carretera asfaltada. No obstante, hay algunos que sí que disponen de esas características por si quieres disfrutar de un coche 4×4. Configura tu…
Hoy en día el mercado está plagado de SUV, coches con una apariencia de todoterreno pero que rara vez cuentan con las aptitudes offroad necesarias para circular con garantías fuera de la carretera asfaltada. No obstante, hay algunos que sí que disponen de esas características por si quieres disfrutar de un coche 4×4.
Uno de ellos es el Renault Koleos 4×4, un coche que equipa un sistema llamado All Mode 4×4-i y el cual hemos puesto a prueba. A continuación te contamos todas nuestras sensaciones sobre cómo va en el campo para saber si realmente puede compararse a los mejores coches 4×4 de su categoría.
Renault Koleos 4×4: unas cotas más que aceptables
Para empezar, la altura libre al suelo del Renault Koleos 4×4 es de 21 cm y se sitúa por encima de la media en comparación con sus rivales, como el Skoda Kodiaq (con casi 19 cm) o el Toyota RAV4 (con casi 18 cm). Por su parte, los ángulos de ataque y salida son de 19 y de 26 grados, respectivamente.
Estas medidas le vuelven a situar en una buena posición si lo ponemos frente a frente con algunos modelos parecidos. Por ejemplo, los datos de un Mitsubishi Outlander en este sentido son de 21 y 22,5 grados, y los de un Toyota RAV4 de 19 y 23 grados.
Renault Koleos 4×4: tres modos de tracción
Existen tres modos de tracción en el Renault Koleos 4×4: 2WD, para seleccionar solo tracción delantera; 4WD Auto, en el que la electrónica se encarga de repartir la tracción entre ambos ejes automáticamente; y 4WD Lock, que reparte la fuerza al 50% entre los dos ejes. De todas formas, el conductor puede ver el porcentaje de reparto de la tracción en el cuadro de la instrumentación en cualquier momento.
Lo malo del modo 4WD Lock es que se desconecta al superar los 40 km/h o al apagar y encender el motor. Además, echamos de menos un control de descenso en pendientes que sí equipa, por ejemplo, el nuevo Dacia Duster 4×4, un vehículo del mismo grupo empresarial y con un precio mucho más barato.
Renault Koleos 4×4: neumáticos y suspensión
Los neumáticos que llevamos en este Renault Koleos 4×4 tienen unas llantas de aleación 19 pulgadas y un diseño más concebido para circular por el asfalto; es decir, no son los mejores para salir al campo. Sin embargo, este coche 4×4 es capaz de enfrentarse a pistas relativamente complicadas con cierta solvencia.
Hacerle perder tracción no es fácil y es más eficaz de lo que esperábamos en zonas embarradas. Además, su suspensión es bastante cómoda y hace que aun pasando sobre partes que están bacheadas la espalda de los ocupantes no sufra, pues el traqueteo no se transmite demasiado al interior.
Lógicamente, el Renault Koleos 4×4 está pensado para un uso principal por carretera y algo en lo que puede mejorar si hablamos de uso offroad (y también no offroad) es en el tacto de su dirección. Tiene un rango de giro excelente, pero es muy poco comunicativa, lo que complica mucho al conductor a la hora de saber hacia dónde están apuntando las ruedas.
Por otra parte, el modo 4WD Lock permite pasar por lugares en los que muchos SUV (e incluso coches 4×4) se quedarían tirados, pero con la pega que hemos mencionado antes: no puedes superar los 40 km/h.
Renault Koleos 4×4: conclusión
¿Nuestra conclusión sobre este coche 4×4? Si quieres salir de vez en cuando de excursión o enfrentarte puntualmente a alguna pista de dificultad moderada, con el Renault Koleos 4×4 puedes hacerlo. Eso sí, que los caminos sean amplios, ya que el Koleos mide 4,67 m de longitud y 1,84 m de anchura, por lo que podría no pasar por alguno debido a sus dimensiones.
No obstante, si te gusta divertirte fuera del asfalto y salir por lugares más salvajes, entonces es mejor que optes por un coche 4×4 más enfocado a ese uso y que pueda salir incluso más barato, como un Suzuki Jimny, un Jeep Wrangler, un Range Rover… y hasta un Fiat Panda 4×4.