Dentro de la amplia gama de modelos de Mercedes-Benz, hay dos descapotables que, en 2019, encaran la recta final de sus respectivas vidas comerciales. Nos referimos al Mercedes-Benz SL y al Mercedes-Benz SLC. Ambos son ya veteranos entre los roadster biplazas, así que la casa de alemana ha decidido lanzar una edición limitada de cada…
Dentro de la amplia gama de modelos de Mercedes-Benz, hay dos descapotables que, en 2019, encaran la recta final de sus respectivas vidas comerciales. Nos referimos al Mercedes-Benz SL y al Mercedes-Benz SLC. Ambos son ya veteranos entre los roadster biplazas, así que la casa de alemana ha decidido lanzar una edición limitada de cada serie, dotada de mayor equipamiento y detalles específicos. Te contamos todo lo que debes saber del Mercedes-Benz SL Grand Edition y del Mercedes-Benz SLC Final Edition.
Mercedes-Benz SL Grand Edition
Comenzamos por el descapotable más grande, el Mercedes-Benz SL Grand Edition, que está en el mercado desde 2012 y recibió un lavado de cara en 2016. Aún le queda tiempo, hasta que salga la próxima generación, pero recibe una edición limitada para dar un impulso a las ventas en el segmento de los deportivos descapotables de dos plazas.
Estéticamente, recibe unas nuevas llantas de 19 pulgadas en el eje delantero y 20 pulgadas en el trasero, con un diseño de diez brazos que combina el brillo y el mate. No hay más cambios significativos, salvo el anagrama Grand Edition en la salida de aire lateral. El diseño destaca por sus líneas suaves y lujosas, un capó muy largo, unas ópticas estilizadas y una parrilla con efecto tridimensional, ya habitual en muchos modelos de la marca. Para la carrocería, hay disponible cinco colores, negro, blanco brillante, negro Obsidiana y dos tonos de grises metalizados.
Interior del Mercedes-Benz SL Grand Edition
En el interior del Mercedes-Benz SL Grand Edition, destaca la nueva decoración del habitáculo, que imprime un aspecto aún más lujoso si cabe. El volante está revestido de cuero Nappa y los asientos están tapizados en cuero Designo en color marrón perla. Además, incluyen un sistema de calefacción integrada en los reposacabezas AIRSCARF, así como función de masaje.
Motores del Mercedes-Benz SL Grand Edition
Esta edición limitada del descapotable de Mercedes-Benz está disponible con dos motores. Por un lado, tenemos el SL 400, que equipa un bloque V6 de gasolina, turbo, que entrega 367 caballos y 500 Nm de par, entre las 2.00 y 4.200 vueltas. Acelera de 0 a 100 km/h en 4,9 segundos y homologa un consumo mixto de 7,7 litros. Por otro lado, el SL 500, con motor V8 turbo, con 455 caballos y una impresionante cifra de par, 700 Nm entre las 1.800 y 3.500 vueltas. Tarda 4,3 segundos en el 0 a 100 km/h y declara un consumo medio de 9 litros. Ambos se combinan con una caja automática de nueve relaciones de convertidor de par.
Mercedes-Benz SLC Final Edition
Por su parte, como dice su nombre, el Mercedes-Benz SLC Final Edition es una serie especial para cerrar su ciclo comercial, después de ocho años en el mercado. Luce un diseño más deportivo, gracias al kit estético AMG, con unos paragolpes específicos y deportivos, llantas de 18 pulgadas de cinco radios, un equipo de frenos con discos perforados y pinzas con el nombre de la marca grabado y el emblema Final Edition en las aletas delanteras.
Interior del Mercedes-AMG SLC 43 Final Edition
Interior del Mercedes-Benz SLC Final Edition incluye algunos elementos exclusivos, como unos asientos deportivos tapizados en negro y plaza, imitación a fibra de carbono, un volante deportivo con la zona inferior achatada y con levas del cambio en negro y el emblema Final Edition grabado en los reposacabezas.
Motores del Mercedes-AMG SLC 43 Final Edition
Se ofrece con el único motor disponible, el SLC 200, con bloque de cuatro cilindros, 184 caballos y 300 Nm de par. Se puede elegir con cambio manual de seis relaciones o el automático 9G-Tronic de nueve.
Mercedes-AMG SLC 43 Final Edition
El as bajo la manga de la marca alemana es el Mercedes-AMG SLC 43 Final Edition, que recupera el color Amarillo Sol con el que fue rpesentado el primer Mercedes-Benz SLK en 1996. Luce también inserciones en negro brillante en el frontal, paragolpes y tiradores de las puertas y un volante AMG Performance. En este caso, el motor es un V6 de 3.0 litros, 367 caballos y 520 Nm. Acelera de 0 a 100 km/h en 4,7 segundos y declara 7,8 litros de consumo medio.