La marca Cupra, nueva filial deportiva e (importante) independiente de la firma española SEAT, cada vez está más cerca de su comercialización. Las últimas noticias sobre ella han confirmado que el que será el primer modelo de Cupra, el Cupra Ateca, podrá comprarse en nuestro país en muy pocas semanas. Recordemos que en Carnovo asistimos…
La marca Cupra, nueva filial deportiva e (importante) independiente de la firma española SEAT, cada vez está más cerca de su comercialización. Las últimas noticias sobre ella han confirmado que el que será el primer modelo de Cupra, el Cupra Ateca, podrá comprarse en nuestro país en muy pocas semanas. Recordemos que en Carnovo asistimos a la presentación internacional de la marca en el mítico Circuito de Terramar, cerca de Barcelona, aunque no ha sido hasta este momento cuando se han desvelado todos los detalles.
El Cupra Ateca, desde 44.790 euros
El Cupra Ateca llegará a los concesionarios españoles a finales de este mismo año. Sin embargo, ya desde octubre SEAT abrirá la preventa de este modelo. Lo cierto es que el Cupra Ateca cuenta con una particularidad muy curiosa y en la que SEAT ha querido añadir un extra de exclusividad: tan solo se podrá ver y tocar en 29 concesionarios en España, entre los que se encuentran Galdakauto (Vizcaya – Galdácano), Fecosauto (Barcelona – Mollet), Iruña (Pamplona), Copervi (Vigo) o Sevilla Motor (Sevilla). Será posible reservarlo o comprarlo en toda la red de SEAT, pero si quieres sentarte en él y verlo en persona será otra cosa.
Mucho más radical
En comparación con el SEAT Ateca, el Cupra Ateca se distingue estéticamente a través de diversos aditamentos deportivos. Entre los principales se encuentran unos paragolpes con unas formas más agresivas, unas llantas de aleación más grandes, la palabra Cupra presidiendo el labio inferior de su frontal, cuatro salidas de escape traseras, nuevas rejillas y, por supuesto, el nuevo logo de Cupra sustituyendo al de SEAT en todos los sitios en los que estaba antes, como el volante, el frontal, la zaga o las llantas.
Un motor conocido… con 300 CV
La mecánica encargada de propulsar al Cupra Ateca es un bloque turboalimentado de gasolina TSI de 2.0 litros que rinde 300 CV de potencia. Es el mismo que monta el SEAT León Cupra 300, último modelo con este apellido que muy pronto pasará a ser el nombre principal. Tiene cuatro cilindros y, unido a una caja de cambios automática DSG de doble embrague y siete velocidades (que por ahora será la única opción en cuanto a transmisión), homologa un consumo medio de combustible de 7,3 l/100km.
Además, al igual que ocurre con el cambio, solo habrá una alternativa en lo referente a tracción: el sistema 4Drive con tracción a las cuatro ruedas. El peso total es de 1.557 kg, superando por poco la tonelada y media. No es poco, pero incluso así el Cupra Ateca es capaz de acelerar de 0 a 100 km/h en 5,4 segundos y de alcanzar una velocidad máxima de 245 km/h. De todas formas, resulta lógico si tenemos en cuenta todo el equipamiento de serie del Cupra Ateca, que incluye prácticamente todo.
El equipamiento, completísimo
Y ya que estamos con su equipamiento de serie, has de saber que cualquier Cupra Ateca añade en su dotación inicial elementos como control dinámico de chasis, sistema de dirección progresiva, varios modos de conducción, asistente de atascos, control de crucero adaptativo, faros Full LED, pantalla táctil multimedia de 8 pulgadas, sistema de sonido Premium, asistente de aparcamiento automático, asientos calefactables, alerta de tráfico trasero, asistente de cambio involuntario de carril, carga inalámbrica para teléfonos móviles y frenada automática de emergencia, entre otros.
De igual manera, el Cupra Ateca dispone de jugosos paquetes de equipamiento opcional, como son el Performance Pack y Carbon Fiber Exterior Pack. El primero de ellos cuenta con un sistema de frenos mejorado y firmado por Brembo, y con unas llantas de aleación de 19 pulgadas. Por su parte, el Carbon Fiber Exterior Pack incluye algunas molduras terminadas en fibra de carbono, como las carcasas de los espejos retrovisores, que le dotan una imagen todavía más radical y deportiva.