La evolución de la radio del coche a través de SEAT

Hoy día nos parece de lo más normal del mundo escuchar nuestra radio mientras vamos conduciendo con el coche, sea en un trayecto urbano o para viajar por carretera. Sea para ir al trabajo o para ir a la montaña, la playa o el campo. No obstante, esto es producto de años y años de…

La evolución de la radio del coche a través de SEAT

Hoy día nos parece de lo más normal del mundo escuchar nuestra radio mientras vamos conduciendo con el coche, sea en un trayecto urbano o para viajar por carretera. Sea para ir al trabajo o para ir a la montaña, la playa o el campo. No obstante, esto es producto de años y años de desarrollo, pues tiempo atrás se consideraba un elemento de lujo. En el Día Mundial de la Radio queremos recordar todos los avances que se han realizado en las consolas centrales de los coches hasta llegar donde hemos llegado en la actualidad con los sistemas de infoentretenimiento.

En los años 60, la radio era un lujo

Como recuerda SEAT a través de un comunicado, en las primeras unidades de su mítico 600 no había radio de serie – tampoco había retrovisores o cinturones de seguridad, algo que hoy por hoy sería impensable en un coche de calle. De hecho, para tener radio en uno de estos coches había que pagarlo aparte. Poco a poco, las radios se volvieron haciendo más comunes durante la década de los años setenta y ochenta.

Evolución de la radio

Para la década de los ochenta no sólo era común tener radio, sino que se había extendido el uso de las cintas de casete en la mayoría de los coches. Más tarde incluso existían radiocasetes extraíbles con las que cambiar la música que se escuchaba mientras uno estaba al volante. A principios de los noventa se dio un giro radical con la introducción del CD, por lo que solo fue cuestión de tiempo para que los casetes dejaran hueco a esta tecnología que ha sabido sobrevivir incluso hasta nuestros días en muchos vehículos nuevos.

Años 90 y ordenadores de a bordo

Durante la segunda mitad de la década de los noventa comenzaron a verse de manera común los ordenadores de a bordo, pequeñas pantallas en las que se podía ver todo tipo de información del coche, como el consumo actual, la hora o la temperatura que hacía en la calle (mediante sensores que podían estar, por ejemplo, en los retrovisores). Como es lógico, la radio también se adaptó a estas pantallas, pudiendo verse incluso el nombre de las emisoras que se iban escogiendo mediante diales que podían estar tanto en la consola central como en un mando del volante.

Evolución de la radio

Pantallas, infoentretenimiento y pulgadas

Hoy día la tecnología no sólo ha evolucionado en términos de mecánica o de mayor seguridad pasiva y activa (que también es importantísimo), sino que tenemos radios con mayor accesibilidad que nunca. Las consolas centrales de los coches cada vez cuentan con pantallas de más pulgadas – incluso en modelos asequibles se pueden encontrar pantallas de 8 pulgadas.

La forma de acceder a la radio en sí también ha cambiado, siendo ahora casi tan sencillo como operar con un teléfono Smartphone. De hecho se asemeja a su uso ya que son pantallas táctiles, con interfaz parecida e incluso los coches y estos aparatos se pueden conectar entre ellos mediante sistemas como Android Auto o Apple CarPlay. Gracias a ello, es posible disfrutar de aplicaciones como Spotify (que permite hacer nuestras propias listas de música) y hacer que suenen en los altavoces de nuestro coche.