Los coches eléctricos con más autonomía del mercado

El club de automovilistas noruego NAF ha presentado un informe que desvela la autonomía real de los coches eléctricos y el Tesla Model 3 Gran Autonomía, con 655 kilómetros, ha resultado ser el vehículo que con mayor autonomía del mercado. Se trata de unas pruebas que se realizan dos veces al año que evalúan el rango de uso de los modelos sin emisiones. A la berlina del fabricante americano le siguen el Ford Mustang Mach-E  (618 kilómetros) y el Volkswagen ID.3 Pro S (564 kilómetros). 

El informe publicado recoge pruebas realizadas a 21 modelos con autonomías oficiales que oscilan entre los 200 y 614 kilómetros. Estas se llevan a cabo en condiciones ideales para el funcionamiento óptimo de las baterías, pues se realizan en carreteras secas, con poco viento y a temperaturas de entre 20 y 25 grados. Lo más sorprendente es que los tres modelos mencionados anteriormente superaron en la prueba el alcance oficial homologado y declararon una autonomía superior a la que la marca anunciada, de hecho, la gran mayoría lo hicieron.

Para las pruebas se llevó a cabo una conducción realista, es decir, incluyendo la velocidad que alcanzamos con tráfico real, combinándolo con terrenos más complicados. En general, los vehículos ofrecieron como media un seis por ciento más de la autonomía oficial. Ejemplos son el BMW iX3 que declaró una autonomía de 556 kilómetros en la prueba de verano mientras que el fabricante anuncia que puede recorrer hasta 450 kilómetros, el Audi e-tron GT que en la prueba de verano recorrió 528 kilómetros mientras que la marca anuncia una autonomía de 468 kilómetros o el Hyundai Kona que recorrió 537 kilómetros en la prueba de verano y su autonomía final es de 484 kilómetros.

Pruebas de conducción

Las pruebas se desarrollan en condiciones reales y las llevan a cabo personas normales. La batería de los vehículos se carga al cien por cien durante la noche y al iniciar la conducción se pone en marcha el motor, sin precalentar el interior ni la batería. Se circula en modo ECO y con el sistema de regeneración de energía activado. 

La ruta se lleva a cabo dos veces, en invierno y en verano y siempre es la misma. Arranca en Oslo (a 23 metros sobre el nivel del mar) y pasa por ciudad, carreteras rurales y autopistas a velocidades que oscilan entre los 60 y 110 kilómetros por hora, con dos pasos de montaña que ascienden hasta 620 y 1.000 metros de altitud, respectivamente.