A partir de ahora el uso del teléfono móvil mientras conducimos estará más penalizado que nunca y es que la Dirección General de Tráfico ha anunciado una reforma que tiene como objetivo penalizar en mayor grado este tipo de prácticas al volante. Hablamos de sanciones más duras que las actuales y que se verán reflejadas en el carné por puntos si no se respetan las normas y cuyo objetivo es el de reducir la cifra de muertes en carretera que con el paso del tiempo se ha visto aumentada.
La distracción es la primera causa de muerte en las carreteras de nuestro país por encima del alcohol y la velocidad y eso es lo que ha remarcado este viernes el nuevo director general de Tráfico, Pere Navarro, durante una rueda de prensa centrada en la siniestralidad de 2017 en la que ha realizado el anuncio de la reforma que introducirá cambios en el carné por puntos, indistintamente de los tipos de carné de conducir. A partir de ahora se quitarán más puntos cuando se realicen infracciones con el objetivo de frenar precisamente este tipo de malas prácticas, entre las que se encuentra el uso del Smartphone.
Cambios en el carné por puntos
Otra de las medidas que también se ha querido remarcar durante el encuentro con los periodistas es la de incentivar los cursos de recuperación de puntos permitiendo al usuario sumar no solo seis puntos como ya se había llevado realizando hasta ahora sino dos más, es decir, ocho. Se añade así, a los cambios que se pretenden incluir en el carné por puntos, que ya lleva 12 años implementado desde que entrase en vigor desde el 1 de julio de 2016 durante el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero.
Navarro también ha querido remarcar la importancia de los colectivos más vulnerables como son los peatones, ciclistas y motoristas y es que conjuntamente representan el 46 por ciento de los fallecidos en carretera. En total, perdieron la vida 359 motoristas, 351 peatones y 78 ciclistas.
En 2017 tuvieron lugar en nuestro país 102.233 accidentes de tráfico con víctimas, en los que fallecieron 1.830 conductores, 20 más que el año anterior y un 1,1 por ciento más. Se trata del cuarto año consecutivo de incremento de víctimas mortales.
